EDITORIAL
La lengua informal que metieron en política
Botonear
En lunfardo, "botonear" significa delatar o alcahuetear, es decir, contar algo a una persona con la intención de que la persona involucrada sea reprendida o castigada.
El PJ, peronismo, kirchnerismo o como se llame, "botoneó" a Espert.
Espert, renunció a su candidatura.
Pero al PJ, peronismo, kirchnerismo o como se llame, que había "botoneado" a Espert, les alcanzaron un espejo.
Todos los candidatos que iban a confrontar con Espert en las urnas, al mirarse en el espejo, veían su cola más sucia que la de Espert.
Mirada desde arriba. Mirada desde abajo.
Chamuyar
En el lunfardo, "chamuyar" significa hablar con el fin de convencer, seducir o impresionar a alguien, a menudo con habilidad y persuasión, pero también puede implicar engaño o mentira.
Cualquier PeJotista, peronista, kirchnerista o como se llamen ahora, sabían del tufo pestilente de sus listas.
Entonces escondieron al montonero ponebombas que busca desesperadamente fueros.
El montonero ponebombas necesita fueros, a eso Cristina lo sabía y Cristina lo propuso.
Devolución de gentilezas.
Ni habló, ni nadie preguntó por él.
Cualunque
En el lunfardo, "cualunque", significa que es indistinto elegir a cualquiera.
Caso A: El cualunque de Cristina se llama Taiana, Jorge, pone bombas, pero de fina cultura.
Caso B: El cualunque de Milei se llama Cualunque, es lo mismo sea quién sea, cualquiera, solo basta que el presidente venga lo apoye le levante la mano, salte, baile, y grite con él hasta que los guardaespaldas lo metan de prepo al auto blindado presidencial, se despoje del chaleco antibalas israelí y pregunte: ¿Quién era este coso que vine a apoyar?
Caso C: Con C de cualunque. El caso de los cualunques agrupados bajo el signo de Provincias Unidas, era inentendible.
Desde el primer día había en el ambiente un tufillo a extorsión.
A barrita de la esquina que te espera para darte una zurra si no soltás el mango.
Y el olor a cala de algunos...
La temprana ambición de otros...
La desesperación de ellos, desnudó la debilidad de los intendentes que llamaban a votarlos.
De esa bajeza, no se sale.
Los chabones que eligen
"Chabón", es una palabra coloquial argentina, que se usa para referirse a un "tipo" o un "hombre", o una "mina", o "jermu". En síntesis, es una forma informal de referirse a una persona, que puede ser amigable o genérica. Dependiendo del tono, puede tener connotaciones neutras o incluso negativas.
Vos viste como es esto.
Los chabones que perdieron dicen: "Nosotros sabíamos que esta elección estaba polarizada". Y Nosotros sabíamos que bla bla y blá.
Y nosotros bla bla y blá.
Los chabones que ganaron dicen: "Nosotros sabíamos que esta elección estaba polarizada" . Y Nosotros sabíamos que bla bla y blá.
Y nosotros bla bla y blá.
Los chabones que votan, no conocieron a Perón ni a Evita, Ni a Juan Ramón Duarte, ni a John Williams Cooke. Menos deben saber de Frondizi, Illia y Balbín.
Ya nadie tiene amor por la camiseta. O quedan pocos.
Pero esos pocos no están obligados a votar.
Pindonga, Cuchuflito y Cadorna
En el lunfardo, el descarte sería algo así como Pindonga, Cuchuflito y Cadorna.
Insisto, son los términos para referirse a las segundas marcas.
No sabés para qué sirven.
De qué barrilete se cuelgan.
Y encima con la blanca palidez de su lengua informal se metieron en la campaña.
Con el mismo libreto.
Dijeron lo mismo.
Exactamente igual.
Yo les escribo la frase y usted sabrá quiénes son la Pindonga, quién es Cuchuflito, y quién el Cadorna en mi Cruz del Eje.
"Estamos aquí, poniendo la cara ante los vecinos, caminando las calles, hablando con la gente ante la falta de justicia social y bla bla blá".
"Estamos aquí, poniendo la cara ante los vecinos, caminando las calles, y bla bla blá".
"Estamos aquí, poniendo la cara y bla bla blá".
Pero como en el primer subtítulo, en mi barrio a todas estas huevadas le llaman efecto bumerán, es decir El "efecto bumerán" cuando uno intenta algo y provoca una reacción contraria a la esperada. Quisieron hablar de justicia social y llevan dos años cobrando varios millones por mes. No se le ocurra querer pegarles una piña correctora en la cara. Son muy pero muy caraduras.
Como les decía, los chabones que hoy votan, no conocieron a Perón ni a Evita, Ni a Juan Ramón Duarte, ni a John William Cooke. Menos deben saber de Frondizi, Illia y Balbín. Pero no les podés vender gato por liebre.
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