OPINIÓN
El caso "Tito López" sacude al Chaco por el alto grado de corrupción
Por Hipólito Ruiz
Esto es un golpe muy duro para tantos pequeños productores agropecuarios, por la desigualdad de la cual han sido objeto a pesar de poner esfuerzo, dedicación y trabajo.
Cuando sembraban, criaban vacas o intentaban emprender algo productivo, y la inundación o la sequía les jugaba una mala pasada, solo se lamentaban o se lamentan, sin asistencia para no caer ni salir del sistema. Claro. En estos casos, la lluvia no moja a todos, solo a los "allegados" al poder lograron "beneficios extras".
Por eso el caso "Tito López" genera tanto repudio de la comunidad, porque el mensaje de la corrupción fue el siguiente: pan y cebolla para el que trabaja (porque son apasionados de la producción en el campo). Y miles, o millones de pesos, para los "vivos" amigos del sistema. Al menos eso se demuestra en el accionar de la justicia federal bajo la órbita del fiscal Patricio Sabadini.
"Tito" recibía recursos a través de sus fundaciones, especialmente del Instituto de Agricultura Familiar y Economía Popular. Ahora, muchos entienden por qué Leandro Zdero al poco tiempo de asumir cerró el IAPEF: plata para algunos; pan y cebolla para otros.
La sociedad chaqueña espera que se llegue hasta el hueso con la investigación, cuando aún está latente que de las causas por "Lavado" que involucró a "lazaros Báez" chaqueños, intendentes imputados, "se enfrió" y hay remanentes de la corrupción (testaferros) que gozan de seguir haciendo "inversiones" con los dineros que son del pueblo.
ENFERMOS Y ROTOS
La Argentina, como lo sostenemos, es un país invadido por la corrupción. El cuerpo social está enfermo y los que toman decisiones provienen de ese sistema, que tiene como víctimas a la sociedad, a la gente, a los más vulnerables. Y sufren los niños, sufren los jubilados. Entonces, se pone en evidencia que el mal de la corrupción como una llaga, invade al cuerpo y sufre la Argentina mientras se ve la violencia, la burla, la injusticia, la inseguridad, el robo, el enriquecimiento ilícito.
Pero no solo pasa en el ámbito público sino también en el privado, en "causas" judiciales donde no se ve el equilibrio de los que deben administrar justicia, o en los hechos impunes.
Se pregunta la prestigiosa escritora Iris Speroni: "¿Qué mundo les espera a mis hijos? ¿A mis nietos, si algún día tengo la suerte de tenerlos? ¿Mis sobrinos? ¿La gente joven que aprecio?".
"Me atrevo a decir que los viejos paradigmas no sirven más. ¿Realmente uno puede creer que graduarse de médico o de contador o de técnico en alimentos le va a asegurar un trabajo digno?", reflexionó, al ver tal vez un escenario de corrupción que invade el país.
¡SE PUEDE ARREGLAR LO ROTO!
Quebrada, marcada, con grietas, la Argentina rota en valores, en altruismo, en solidaridad, que por estar con fisuras, pierde todo lo que se deposita, pero pese a todo, tiene una posibilidad de recuperarse, aunque el 95% de la sociedad opine lo contrario.
Hay una acción, mediante la cual, se recuperaban las vasijas rotas, que en japonés le llaman "kintsugi".
Esta acción quiere decir "reparar con oro", y es un método mediante el cual el alfarero en vez de esconder las marcas de las roturas, las exhibe como testimonio vivo de que ha sufrido, pero la repara colocando oro, y a través del kintsugi, le da una nueva vida a la pieza transformándola en un objeto incluso más bello y más valioso que el original.
En Japón dicen que, en forma metafórica, ésta práctica las usan reponer las cosas, mostrando los defectos para que se conviertan en afinidades que una a las familias detrás de la búsqueda de objetivos comunes. "El kintsugi celebra los cambios y los defectos, ya que donde hay grietas ve oportunidades para forjar con un material mucho más valioso que el anterior", dice la explicación.
Ese proceso de un pueblo como el argentino debe comenzar en casa, volviendo a los valores, a los principios y al uso de las virtudes. Porque la familia es la unidad básica y necesaria de una comunidad.
El preámbulo de nuestra Constitución Nacional Argentina declara "promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino: invocando la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia".
Es decir, el Dador universal de estos principios es el Dios Creador, como dice el preámbulo. Así, el kintsugi es posible. Si yo no lo creyera, no escribiría estas líneas en esta columna.
Economía: ¿bajarán los impuestos?
Si alguno pensaba que en este 2024 bajarían o eliminarían las retenciones a las exportaciones de productos claves como la soja, se equivoca. No hay un sector que le genere el ingreso de dólares al país como la actividad agropecuaria. Sin embargo, en algunos aspectos se van logrando algunos pasos. Pero falta, y mucho para que las pymes y la clase trabajadora pueda respirar oxígeno.
"Estamos en problemas", le advirtió el economista Claudio Zuchovicki al presidente Javier Milei por la suba de impuestos y tarifas.
En Sáenz Peña, hay varios locales comerciales cuyos dueños ya dijeron que no podrán soportar el aumento de las tarifas de luz, por ejemplo, que junto a otros impuestos y la caída de ventas, pone en la cornisa de la actividad a las pymes.
Zuchovicki le sugirió al presidente avanzar con la baja de tributos "que hacen que la Argentina sea un país caro". "¿Por qué tienen que mejorarle los ingresos al Gobierno si el esfuerzo es mío?", reclamó.
Al analizar el supuesto atraso cambiario que señalan algunos especialistas y de un posible salto devaluatorio, Zuchovicki recomendó cambiar el foco y apuntar a los impuestos "que hacen que la Argentina sea más cara".
El país es caro porque la intermediación es cara, el 48% del precio de lo que compramos son impuestos, eso es lo caro. Mientras no se ataque esa raíz, estamos en problemas, y eso no lo resolvés devaluando. La competitividad pasa por todos los costos adheridos que vos tenés en el medio", remarcó.
La foresto industria quiere un cara a cara Zdero
Entidades forestales de todo el Chaco, nucleadas en la Federación de Asociaciones de Productores e industriales Forestales –FAPIF- plantearon en Sáenz Peña la necesidad de solicitarle al gobernador del Chaco Leandro Zdero junto a los titulares del Ministerio de Producción y del Instituto de Colonización una audiencia para abordar temas que consideran que son claves para el desarrollo sustentable del sector.
Las entidades resolvieron pedir una audiencia al gobernador Leandro Zdero para saber cuál es el plan en torno a la actividad forestal en la provincia, indicando que "no tenemos claridad en cuanto al futuro de la actividad forestal en la provincia, ya que es muy difícil planificar inversiones y trabajos sin tener un panorama claro de lo que puede suceder".
A la par, solicitaron gestiones para que logren avances para que la acreditación de la actualización del ordenamiento territorial de los bosques nativo-OTBN- por parte de la Nación, como también saber cuál es el impacto que tiene para el Chaco estar incluidos en el Pacto de Mayo como también la valorización de las autonomías provinciales de los recursos naturales.
(NORTE Chaco)
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