LO QUE EL INCAA SE LLEVÓ

EDITORIAL

¿Qué pretende usted de mi?

Por Walter R. Quinteros

En el Boletín Oficial, la Secretaría de Cultura informó que quitaba el apoyo económico a las provincias, daba de baja los contratos de parte del personal, suspendía el pago de horas extras y puso fin a viajes, gastos de telefonía celular, compra de comida y pago de traslados. 

Las autoridades defienden el recorte diciendo que el organismo se encuentra en "una situación económica delicada". "Se terminaron los años en los que se financiaban festivales de cine con el hambre de miles de chicos".

Pero los trabajadores del instituto, se convocaron a movilización y criticaron el "cinismo" del Gobierno de Milei. "Mientras le quita la comida a los comedores populares y congela las jubilaciones, dice que los festivales de cine le sacan los medicamentos a los jubilados y son culpables del hambre de las niñeces". Así se expresaba la representante sindical de los trabajadores del INCAA, Ingrid Urrutia. 

Nada más erróneo en lo expresado por esta sindicalista ya que el INCAA es un ente público no estatal que tiene como función "promover, fomentar, fortalecer y regular la producción audiovisual" del país.

Los críticos consideran que el organismo es vetusto, ineficiente y está ideologizado. El periodista cultural Leonardo D’Esposito escribió recientemente en un duro artículo que el INCAA "gasta más en burocracia que en hacer películas" y que hay estrenos de cine nacional "que no vendieron ni diez entradas" en 2023. 

Los datos del INCAA muestran que el año pasado se estrenaron 241 filmes nacionales en Argentina; de ellos, solo seis tuvieron más de 100.000 espectadores. 

Además, el público colocó entre las diez películas más vistas todas películas extranjeras. "El balance es preocupante: las películas argentinas no concitan el interés del público", concluyó D’Esposito en La Nación.

En un artículo de Mariel Fitz Patrick,Sandra Crucianelli e Iván Ruiz de Infobae, ya nos señalan que desde el 2020 al 2022 qué películas vendieron menos de 2.000 entradas y decenas de films que aún no fueron estrenados recibieron subsidios del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) por aproximadamente $20 millones cada una en los últimos dos años. 

Durante la gestión de Alberto Fernández, el organismo público otorgó más de $3.500 millones a productoras y directores argentinos. Los números surgen del análisis realizado por la Unidad de Datos de Infobae sobre los listados mensuales de subsidios entregados a las productoras que publicó el INCAA en su página web, entre enero de 2020 y abril de 2022. 

Tras las restricciones por el Covid-19, en 2021, el INCAA entregó $1.998 millones para financiar el cine nacional, más del doble de lo registrado en 2020, cuando las salas estuvieron cerradas gran parte del año. En ese primer año de la pandemia, los subsidios otorgados fueron por un total de $940 millones.

En el año 2021 se pagaron 847 subsidios, un 45% más en cantidad que en 2020, destinados a 443 películas. En los primeros meses del 2022 se otorgaron $596 millones a otras 167 películas. Dos de las películas más vistas desde el 2020 a la actualidad, "El robo del siglo" y "La Odisea de los Giles", encabezan el ránking de los largometrajes con más subsidios recibidos. "El Robo del Siglo", estrenada en 2020 recibió $33,5 millones de subsidios del INCAA, en el 2021. Mientras que "La Odisea de los Giles", estrenada en 2019, recibió un total de $27,5 millones.

Hay miles de películas o proyectos que solicitaron subsidios y que pueden ser consultados en la página del INCAA.  Aquí los últimos datos;

Total general: 1308

No iniciaron rodaje: 708

Iniciaron rodaje: 276

Finalizaron rodaje tan sólo: 27

Presentaron copia: 297

Y un caso para balearse en un rincón, "Las hijas del fuego", caratulada como "ficción" pero es pornográfica recibió un subsidio de 18 millones, y sólo la vieron 7 mil personas desde 2018, según lo señala en una nota el sitio Realpolitik y publicada en este medio el 6 de abril.

Si vemos que apenas recaudan para pagar la luz, muy lejos está la sindicalista del INCAA al expresar que: "En primer lugar, el INCAA se financia con impuestos a la recaudación que el propio sector genera". 

¿El propio sector genera?

"Y que en gran medida no se generarían sin la promoción del Instituto. Pero además suma mucho más a la economía nacional y a la recaudación fiscal de lo que utiliza".

Esto escapa a cualquier análisis.