SOCIEDAD / POLÍTICA
Se presentan tres listas para conducir el órgano político y gremial del Poder Judicial por los próximos dos años. Quiénes son los candidatos, cuáles son sus objetivos y cómo impacta la elección nacional del domingo
Por 
Martín Angulo
Antes de las elecciones presidenciales del domingo, el Poder Judicial tendrá sus propios comicios. Serán mañana para elegir al próximo titular de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN), la entidad política y gremial de los jueces y fiscales nacionales y federales. Se presentan tres listas y están habilitadas para votar cerca de tres mil personas.
La elección definirá al nuevo presidente o presidenta de la entidad que asumirá un mandato de dos años en simultáneo con el nuevo gobierno nacional, en una relación siempre tirante por el protagonismo político que tiene desde los últimos años el Poder Judicial. El jueves también será el cierre de campaña de los cinco candidatos presidenciales.
Es la primera vez que ambas elecciones coincidirán. Las de la AMFJN siempre son en años pares para que no coincidan con las presidenciales pero por la pandemia los mandatos de las entidades civiles se prorrogaron por un año y así quedaron para 2023.
Tres listas competirán mañana. La “Lista Bordó” lleva como candidato a Andrés Basso, juez del Tribunal Oral Federal 3 de Comodoro Py. La Bordó es el histórico oficialismo en el mundo de la política judicial. Está al frente de la AMFJN hace 20 años, hoy con la presidencia de Marcelo Gallo Tagle. En los lineamientos políticos nacionales, la Bordo ha siempre crítica del kirchnerismo y más cercana a Juntos por el Cambio.
La “Lista Celeste” es la que busca romper con esa hegemonía. Cercana al oficialismo, lleva como candidato a Eduardo Gottardi, juez de la Sala II de la Cámara Civil y Comercial Federal. La expectativa de la agrupación es ganar la elección y terminar con las dos décadas de la Bordó. Para eso se aferran a que en la última elección de 2021 para el Consejo de la Magistratura perdió por apenas 39 votos.
La tercera en disputa es “Compromiso Judicial”, la agrupación más nueva de la política judicial que se creó hace 10 años como un desprendimiento de la “Lista Celeste” por sus posturas muy cercanas al kirchnerismo. Compromiso lleva como candidata a presidente a Karina Perilli, jueza del Tribunal Oral en lo Penal Económico (TOPE) 3. Sabe que ganar la elección es muy difícil pero busca obtener más votos que en la última elección y mantener la cantidad de integrantes en el Consejo Directivo de la AMFJN u obtener uno más.
El padrón habilitado para votar es de cerca de tres mil personas. Son jueces, fiscales, defensores oficiales, funcionarios y peritos que estén afiliado a la AMFJN. La votación no es obligatoria y se realizará de 9 a 18 horas en las sedes de cada Cámara Federal o Nacional. La atención estará concentrada en los edificios judiciales más grandes como el Palacio de Tribunales y los que los rodean y Comodoro Py.
El edificio judicial de Retiro tiene un peso específico. No solo porque es el más político de todos ya que por allí pasan las causas que le interesan al poder, sino porque muchos de sus integrantes juegan activamente en la elección. La “Lista Bordó” lleva como presidente a Basso y en su lista para el Consejo Directivo están Mariano LLorens, juez de la Cámara Federal, y al fiscal federal de juicio Diego Velasco como revisor de cuentas suplente.
Las otras listas tienen presencia de Py con fiscales federales de primera instancia. La “Lista Celeste” tiene a Franco Picardi para integrar el Consejo Directivo y “Compromiso Judicial” a Eduardo Taiano para el mismo cargo, además de la candidata a presidente Perilli que tienen su tribunal en el edificio de Comodoro Py.
En el interior del país la elección comenzó la semana pasada. Como se vota en las sedes de cada Cámara Federal o Nacional hay juzgados que quedan a cientos de kilómetros de allí por lo que en esos casos el voto es anticipado y por correo.
Quiénes son los candidatos
Basso, Gottardi y Perilli comparten algo. Conocen el Poder Judicial desde jóvenes y desde adentro. Hicieron toda la carrera judicial en distintos fueros, tienen más de 30 años en la justicia y llegaron a ser jueces por concurso público.
Basso hizo su carrera en la justicia federal de la provincia de Buenos Aires, primero en La Plata y después en Lomas de Zamora. En 2015 fue nombrado juez del Tribunal Oral Federal 3 de Comodoro Py donde le tocó intervenir en casos de alto impacto político y público. El más importante fue el juicio oral por la obra pública en el que el año pasado el TOF 2 condenó a la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner. El voto de Basso fue el más duro porque se inclinó por condenar por asociación ilícita, aunque quedó en minoría con sus colegas.
También juzgó el caso Oil Combustibles, al reducidor de autos Carlos Telleldín por el atentado a la AMIA, condenó a los testigos que mintieron por decir que el juez Sebastián Casanello había estado con Cristina Kirchner en la quinta de Olivos. Además intervino en juicios de lesa humanidad (condenó a Miguel Etchecolatz) y de narcotráfico, como el del líder peruano Marcos Estrada González, condenado a 24 años de prisión.
Perilli hizo su trayecto judicial en el fuero penal económico donde fue jueza subrogante en lo penal tributario. También fue secretaria letrada en el Consejo de la Magistratura de la Nación y en 2010 fue designada magistrada del TOPE 3. Allí juzgó el caso de contrabando conocido como “Manzanas Blancas”, el envío de tres toneladas de cocaína a España en contenedores de esa fruta.
También tuvo el caso del “Clan Loza” por narcotráfico y lavado de dinero en el que se dispuso el decomiso de más de 100 bienes de los condenados. Y como jueza subrogante en un tribunal oral federal, Perilli juzgó las irregularidades en la investigación del atentado a la AMIA y condenó al juez de la causa Juan José Galeano, entre otros.
Gottardi comenzó en la justicia en 1976. Lo hizo en el fuero civil desde atravesó toda la carrera hasta llegar al cargo de juez de primera instancia y en 2017 fue nombrado juez de la Cámara Civil y Comercial Federal, un fuero de un perfil bajo sin causas de impacto público como ocurre en la justicia penal. Se trata de un fuero que, entre otros temas, se encarga de amparos por salud.
Alguno de los tres asumirá en diciembre como titular de la AMFJN. Se prevé que sea el 14 de diciembre, en la cena de fin de año de la entidad. Cuatro días después que lo haga el nuevo presidente de la Nación. Dos etapas que tendrán vínculo.
(Infobae)
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