EDITORIAL
¿Qué será para ellos, ética y moral?
Por Walter R. Quinteros
Nos dice la Enciclopedia Humanidades que la moral es el conjunto de reglas y normas que regulan el comportamiento del individuo o una sociedad. Mientras que la ética es la disciplina que reflexiona sobre los problemas y dilemas morales, es decir, estudia cómo se ejercen estas reglas.
Indagando un poco más, tenemos que hay diferencia entre moral y ética, veamos:
La ética le sirve al hombre para pensarse a sí mismo y, a la vez, pensar cómo concibe lo correcto y lo incorrecto en los distintos ámbitos de su vida. La ética es una disciplina fundamental en la formación de los distintos códigos de conducta y también en la forma en que se imparte (o no) la justicia.
La moral es necesaria para la convivencia pacífica y armónica de las distintas comunidades. Aunque las sociedades más moralistas no son necesariamente las más prósperas, todas las comunidades que se precian de ser moralistas se rigen por un código moral compuesto de distintas conductas, hábitos y costumbres. Tome.
Ahora traslademos estos conceptos a la política local.
Cualquier ciudadano tiene derecho a conocer —por ejemplo—, cuáles son los sueldos de los funcionarios. Esto se debe a que dichos sueldos se solventan con dinero de los contribuyentes, ¿verdad? ¿Alguien sabe? No. Entonces aquí ya nos encontramos con una cuestión básica de transparencia y de ética, ya que esa información debe ser accesible para los ciudadanos que los eligieron. No darlos a conocer demuestra falta de moral.
Y así, seguimos con horarios, personas a cargo, materiales, equipamiento, obras, gestiones, viáticos, combustible, etcéteras y etcéteras que, nada sabemos.
Otras preguntas serían: ¿Por qué aceptamos los falsos valores de algunos políticos repartidores de bolsones del Estado, pululando cada cuatro años?
¿Se dio cuenta que hay políticos que creen solo tener derechos pero no obligaciones?
Para ellos, parece ser que lo único que vale es que dicen, o su silencio. Entonces, ¿a quiénes reclamamos por saber algo que nos interesa a todos? Calma, ellos se encargarán de activar todos los mecanismos para silenciar al preguntón.
Y nos va a pasar a todos los preguntones por el solo hecho de ser auténticos. Por querer ejercer un derecho, por profesionales, o por que no nos vendemos a "las pautas" coimeras.
De repente me viene a la mente un ejemplo. Usted paga el viaje en un ómnibus, o taxi, sube pensando en su derecho de viajar lo más cómodo posible, en llegar a horario y que el viaje sea seguro. Pero no, el conductor se pone a hablar por teléfono mientras conduce. Lo que hace no es ético para con usted, ni para con su trabajo. Y veamos, si no cumple con su trabajo correctamente, ya lo hace un inmoral en su puesto. Pero este conductor, está convencido que debe contestar un llamado, él cree que le corresponde. Usted, que es el que paga el viaje, sabe que lo que está haciendo el conductor es incorrecto. ¿A quién y cómo se queja?
Sucede que como vengo del transporte público, siempre tengo a mano estos ejemplos relacionados a ésa actividad. Pero volviendo a los políticos:
¿Enumeró a los funcionarios éticos que conoce? Bien, ahora enumere a todos los otros que se "distraen" mientras tienen el deber de saber conducir o administrar.
¿Y, a los otros que merodean en las sombras? ¿Les conoce el pedigree?
Cada sociedad va modelando a sus políticos de acuerdo con sus costumbres, con eso de "que aquí somos así, no pasa nada, es el hijo de, lo que pasa que tiene plata, en el fondo es bueno" etc. son cosas que los mal acostumbran a conducir como se les da la gana. Pero siempre debe haber necesidad de valores en esta gente.
Vamos con este otro ejemplo: El bebé de su casa —supongamos—, llora, pide. No sabe, no mide. A veces, los mayores, le hablan para hacerle entender, otras veces para que entienda, recibe una reprimenda tipo karate kid, eso sucede hasta que aprende o toma conciencia de lo que no se debe hacer. Y el changuito empieza a razonar a medida que crece. "Debo comportarme 'éticamente' porque aquí me castigan".
Parece que por aquí no castigamos, no hacemos karate kid con estos políticos ni tampoco nos fijamos quiénes están detras de los cortinados calentando sus orejas en los "búnker".
No pedimos ficha limpia a nadie. Somos conformistas, acomodaticios hasta en eso.
Y entonces, aparecen algunos atorrantes que merodean sin ética de partido político en partido político, buscando solo la especulación de la ganancia que le va a redituar un cargo.
Las personas éticas, siempre se preguntan si lo que está por hacer está bien, o está mal, si sirve y para quién sirve. Si perjudica, a quién perjudica. Y hablan de frente. ¿Saben lo que es eso? Por aquí, parece que no se consigue ése tipo de personas con cierto grado de hombría.
Los que merodean atrás de los cortinados, en el subsuelo, o en la sombras, carecen de ética, son los que "llenan las cabezas" en contra de, a favor de, especulan para unos o, trabajan para otros. Pero tampoco lo son, aquellos que se "dejan llevar" por esos alcahuetes baratos, ya que carecen de la moral suficiente por permitir que existan y que les cambian el rumbo y encima, no permiten algún tipo de réplica, que es un derecho.
Y aquí aparece la falta de moral de estos personajes, porque ésas actitudes, le hacen muy mal a la política, luego a la sociedad y fundamentalmente a las instituciones.
Al que le quepa el sayo.
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