¿QUÉ PASARÍA SI NOS INDEPENDIZAMOS DE BUENOS AIRES?

EDITORIAL

¿En Buenos Aires se decide, resuelve y ejecutan todas las medidas para todo el país?

Por Walter R. Quinteros

Ayer quería ver fútbol. Instituto Atlético Central Córdoba versus Tigre, sin moverme de mi mesa de trabajo. Hay una ventana a la que llaman "Chat del stream", por momentos divertida, se dicen de todo, de fútbol nadie opina nada. Pero alguien escribe, "mirá estos cordobeses, silban al Himno". Inmediatamente le responden, "al Himno no, a Tigre". Otro dice que querés con estos cabecitas". Y las respuestas fueron escandalosas. Desde el "a nosotros los piqueteros no nos cortan la calle cada media hora", "todo para ustedes, muertos",  hasta el "cállensen locos (sic) si ustedes viven gracias al laburo nuestro, se reparten nuestra guita". Aviso: Cómo me cuesta no escribir los insultos. Mamita.

Pintaba para ver fútbol. No hay caso, tengo que volver a concentrarme en lo mío. Empecemos con eso de que "todo para ustedes".

"Vaca muerta" es el nombre de una reserva de hidrocarburos, fue denominada con ese curioso nombre en 1931 por el estadounidense Charles Edwin Weaver (1880-1958), doctor en Geología y Paleontología, que encontró el compuesto químico aflorando en toda la sierra de Vaca Muerta. Él trabajaba en la empresa Standard Oil de California, que hoy es Chevron.

Los depósitos de Vaca Muerta no se confirmaron hasta 2011, ochenta años después. En ese entonces, Repsol YPF lo anunciaba como un "hallazgo de calidad mundial". 

La idea de un gasoducto que una Vaca Muerta con Buenos Aires fue lanzada por la administración de Mauricio Macri —todo para ellos—. A mediados de 2019, la secretaría de Energía convocó a una licitación privada para un gasoducto troncal, con el nombre de "TGC" (Transporte de Gas del Centro), una forma de complementar los existentes tramos de TGS y TGN. O sea, Macri quería unir Vaca Muerta con Buenos Aires.

Todo para Buenos Aires.

El gobierno de Alberto Fernández retomó el proyecto con otro formato. Y recién pisó el acelerador el pasado año, preocupado por la sangría de dólares que tenía por las importaciones energéticas. La empresa estatal YPF es la que encargó la construcción del gasoducto, a un costo aproximado de US$ 2.700 millones. Pero el proyecto no tuvo inmediata luz verde por parte del kirchnerismo que no querían esa obra.

Ayer, el presidente Alberto Fernández señaló que el "destino" le ha permitido que "empecemos a declarar la independencia energética un 9 de Julio en el corazón de la provincia de Buenos Aires". Así lo manifestó al encabezar el acto de inauguración del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) en Salliqueló. Es decir, inauguraron nada más que un tramo.

Y seguimos con "todo para Buenos Aires".

Puede apreciarse que "el centralismo porteño nos tiene cansados", como escribía otro participante del chat. Con ciertos subsidios, como para el Transporte Urbano de Pasajeros y, la lista sigue. ¿Es porque en Buenos Aires se decide, resuelve y ejecutan todas las medidas para todo el país? y, ¿qué producen ellos que venga para aquí?

Como escribió alguien más en el chat, "todos los recursos van desde el interior para allá". Empecemos: Todo lo que se vende en el mercado interno va a Buenos Aires, allí los acopian y allí resuelven qué, cuanto y como repartir a los verdaderos dueños de esos recursos. 

El periodista Hipólito Ruiz del diario NORTE, de Chaco, nos dice que del Norte Grande Argentino salen productos como arroz, yerba mate, té, algodón, soja, limón, maíz, trigo, miel, sorgo, girasol, azúcar, poroto, garbanzos, cártamo y tártago, alfalfa, tabaco, plantas aromáticas, vinos de calidad, carne bovina, ovina, avícola, porcina y caprina, frutas, verduras, hortalizas, flores, tanino, carbón vegetal y otras maderas. Pero también este Norte Grande genera minerales estratégicos para el desarrollo del país como litio y cobre, junto a hidrocarburos y energía renovable, que son la piedra basal del crecimiento de la Argentina.

Ahí tienen. Pero también se señala que "la idea de unir a los diez gobernadores del Norte Grande es con el objetivo de propender a la unidad regional y el desarrollo estratégico de nuestra región, a través de la conformación de una agenda temática y propositiva en materia de logística integrada, red vial urbana y rural, agua potable y cloacas, viviendas, fibra óptica, conectividad, energía urbana y rural, desarrollo económico e inversiones, ordenamiento territorial y urbano, educación, salud, deporte, turismo, cultura, seguridad, justicia, ambiente, integración regional e internacionalización de nuestra producción".

Volvamos a los defensores de los silbadores del equipo "porteño". Se supone, cordobeses.

Si el Perfil Productivo de la provincia de Córdoba dice que la economía de la provincia se ve beneficiada por numerosos factores, el principal es su agraciada geografía y cuantiosos recursos naturales y humanos. Por su posición geográfica, sus características climáticas, topográficas y fitogeografías se ven favorecidas diversas actividades productivas como la agricultura, ganadería, minería, explotación forestal, turismo, etc. Y, que dichas actividades se complementan con un importante desarrollo industrial, principalmente orientado a lo metalmecánico y agroindustrial además del comercio y el turismo. ¿El dinero queda aquí?

Y que otro polo de desarrollo industrial está dado por un pujante sector de fabricantes de bienes de capital para el sector agrícola, en especial maquinarias y agrocomponentes, con principal protagonismo en la zona del sudeste provincial, donde está la zona núcleo de producción agraria. Se destaca la producción de cosechadoras, tractores, tolvas, sembradoras, agropartes, pulverizadoras, embolsadoras de granos, equipos para industria láctea y silos.

Todo lindo pero... ¿Saben una cosa? Las agendas y los insumos a importar se deciden desde un escritorio en Buenos Aires. Lo que se va exportar, también. Y, ¿eso ha funcionado?

Seguramente, tenemos entonces que algunos silbadores son empleados de esta pujante industria local, que esperan que en Buenos Aires decidan su salario.

Onomatopeya del silbido: Dice la Real Academia Española que no existe una onomatopeya consolidada del silbido en español, pero se documenta como "fiu", en ocasiones con alargamiento de la "u". Va un ejemplo:

—"Mirá qué linda está esa porteña, fiu, fiuuu". 

Y yo que quería escribir sobre el tema de la Declaración de nuestra Independencia, mientras miraba jugar a Instituto. Te sacan del eje, te sacan, "¿vistes?".



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