OPINIÓN
Se trata de gastos innecesarios en lugares donde literalmente faltan inversiones en cuestiones más básicas
Por Nicolás Sanz
En la provincia se celebran un sinfín de festividades, muchas provinciales, otras municipales y también, cómo no, en adhesión a las nacionales. El tema no está allí, sino en el gasto desmedido que se destina a las mismas.
Como ejemplo se puede poner que por el festejo del Día de la Niñez el departamento de Luján de Cuyo destinará más de 12 millones de pesos en cacao, chupetines, caramelos (entre otras cosas) todo de primera marca.
En Diario Mendoza Today se han contado innumerables situaciones como estas donde, si bien a simple vista no parece nada malo, se trata de gastos innecesarios en lugares donde literalmente faltan inversiones en cuestiones más básicas.
Eso es lo que puede observarse en Malargüe, por ejemplo, donde la cantidad de obras prometidas y no realizadas son superlativas. Incuso muchas dependientes del Gobierno provincial no fueron ni siquiera reclamadas.
Sin embargo, en lo referente a la fiesta provincial de la nieve, la comuna gobernada por el intendente Juan Manuel Ojeda estima destinar unos 20 millones de pesos, pero ahí está, las prioridades de la política no son las mismas que las de la ciudadanía.
¿Sino cómo se explica la acusación que pesa sobre el intendente por haberle “regalado” más de 3 millones de pesos a un empresario amigo por una pauta que nunca se hizo? Es más, la concejala Paola Rojo, que ingresó de la mano de Ojeda al Concejo Deliberante denunció irregularidades e incumplimiento de ordenanzas por parte del propio jefe comunal.
Pero los ejemplos de gastos millonarios en cuestiones irrelevantes a las necesidades de la gente son innumerables. Flor Destéfanis proyectó un gasto de 2 millones para publicitar un centro sustentable en su aspiración reeleccionista; Raúl Rufeil en San Martín, lanzó una contratación directa por más de 1.2 millones de pesos para comprar tortitas y 900 mil pesos en un servicio de catering y así. No hay vuelta que darle.
Cómo no destacar incluso que mientras las escuelas de la provincia se caen a pedazos y los salarios docentes están entre los más bajos del país, la Dirección General de Escuelas a cargo de José Thomas lanzó una licitación pública para comprar 7 vehículos por un valor aproximado de 55.5 millones de pesos. ¡Una locura!
Realmente se puede seguir enumerando, pero no tiene sentido porque lo único que intenta reflejarse en la presente columna es el abismo que hay entre la política y la gente. Porque todos esos gastos se hacen a instancia de la sociedad. ¿O acaso la plata sale del bolsillo propio?
La administración, tanto de la provincia como de muchas de las Municipalidades, es desastrosa. Escuelas, como se cuenta más arriba, que se caen a pedazos, muchas incluso terminan cerrando. Zonas enteras sin agua potable o hasta sin sistema cloacal, salarios paupérrimos, hospitales deteriorados, y una larga y lamentable lista de etcéteras.
Ni hablar de los gastos del Ministerio de Cultura y Turismo, donde se desvanecen millones y millones en boludeces poco o nada importantes. Y todo esto sin tener en cuenta la corrupción que desborda en la provincia.
¿Acaso pasó algo con las irregularidades y los sobreprecios descubiertos por Diario Mendoza Today en la compra de la pantalla led para el estadio Malvinas Argentinas? Nada de nada, la situación quedó ahí, como si fuera una trivialidad, a pesar de lo grave de la situación.
¿Cambiará ello alguna vez? ¿Se harán las reformas necesarias de fondo para terminar con tantas inutilidades? No parece que ello fuese a pasar, a pesar de los reclamos, a pesar de que los elementos estén a la vista, todo indica que la política seguirá poniendo parches improductivos diseñados para que dentro de la norma pueda aprovecharse la trampa.
También hay miles de ejemplos para ello, pero eso, bien se podrá reflejar en otra columna.
(Mendoza Today)
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