COSECHARÁN TEMPESTADES

EDITORIAL

Lo que está ocurriendo en Cruz del Eje, es lo que se veía venir cuando se vota como se vota 

Por Walter R. Quinteros

No se vota a la persona ni a sus propuestas sino, a la simbología o, a la heredada simpatía partidaria.

Ahí están las consecuencias. La gente que se postula no es la misma y entonces acomodan el libreto a su manera, a su conveniencia.

Los objetivos de nuestros políticos gobernantes de turno eran netamente los de llevar a cabo sus ambiciones personales. 

No han sabido gestionar ni defender absolutamente nada. Y por eso, pasarán a la historia.

En los barrios acrecientan las protestas por su emblemática inacción. Solo basta con dar una vuelta por las redes sociales y, si tiene tiempo amigo lector, caminarlos. Otra propuesta es que camine por la calle Rivadavia, la más céntrica. Ocho meses de penurias.

Las escasas obras son planes de la Provincia, dinero de contribuyentes que ni conocen esta ciudad. Eso se llama discrecionalidad partidaria en el reparto de las suertes.

En salud, dejan mucho que desear. Intente sacar un turno para ser atendido por un médico antes de morir.

El Dengue ya es comunitario. No supieron combatirlo.

Perdimos 1345 hectáreas del departamento. Y ahora se hacen las víctimas de otros "cumpas" más rápidos que ellos.

No se construyó ni una sola vivienda para el ciudadano común. Para ellos si. Lo mío es mío y lo tuyo es mío. Los políticos nunca quiebran económicamente. Se sabe.

Tampoco hay informes de la situación económica local.

Lo único que funcionó fue su "agencia de colocaciones" para sus amiguitos y familiares. Todos acomodados y de la noche a la mañana, ricos.

Saquémonos la máscara. Todos pertenecen al justicialismo. Les guste o no. Les conviene que el general Perón no resucite. (General, grado de oficial militar)

Un fracaso total. Administrando y legislando.

Aunque lejos estén de la doctrina de su fundador, cada uno, intendente y legislador, y al más puro estilo de dictadores enquistados en el poder, jamás mostraron un miserable plan de trabajo que favorezca a la Ciudad, o un proyecto a poner en consideración para todo nuestro Departamento.  O algo para debatir. Para todo, tuvo que venir el gobernador con dinero.

Ha quedado demostrado, que el único plan que tenían era desestimar todo aquello que les estorbaba es sus aspiraciones. Censurar nuestro medio de prensa por sus opiniones, como un claro ejemplo, y "pautar" con los suyos para que todo se vea color de rosa.

Para llegar al poder, pusieron toda la parafernalia partidaria a su servicio, porque sus proclamas políticas estaban impregnadas de un tufillo de palabras vacías, vagas expresiones de deseos y mentiras hasta el hartazgo.

Nadie pareció tener el olfato suficiente para advertirlo. Ni siquiera aquellos que dicen llamarse "oposición". Tal vez, no quisieron abandonar su zona de confort. O no les interesó.

Algunos prefirieron "negociar" una banca con ellos o, entre ellos mismos y guardaron su espada ejemplificadora de telgopor para otra ocasión. 

Cosas de políticos que dicen "vamos por más"... negocios, claro.

Sin embargo, el tiempo y su trayectoria como funcionarios plagada de errores, han terminado por demostrar que no eran más que unos simples usurpadores de la doctrina de su partido.

Lo que pasa es que "la estructura" del partido, se los permitió. Háganse cargo, tomadores de cafecitos de ciertos bares con caras de "yonofui".

Porque parece ser que el discurso que emplearon no era otra cosa que un vehículo para llenar sus propios bolsillos y de los que les consintieron cada acto. Más allá del acto electivo, nadie optó por un "correctivo" a los elegidos, parece. Porque el habitante común no ha mejorado en nada su calidad de vida. "Primero la gente", decían.

Tenemos entonces que el justicialismo local no es un partido estructurado o con un proyecto político serio. Ni Tribunal de conducta debe tener en su Carta Orgánica. Más bien, parece una organización caudillista constituida con el propósito de tapar sus "quilombos". 

Tanto enunciar la palabra "compañero" en cada reunión, que con los hechos a la vista, debieran emplear la palabra "compinche". Y eso de "pueblo unido que jamás será vencido", traducirlo a ciertos convenios de carácter personal donde el pueblo unido sigue hundido. Mientras ellos cambian sus flotadores todos los años.

Y así, la fórmula que emplean de "Estado presente" debiera entenderse como algo de, "mantengamos los fueros presentes". No hubo tal presentismo ni protección alguna para el resto de los sufridos contribuyentes, que ni servicio de transporte serio y confiable tienen.

Tal es así que ninguno da la cara, están escondidos. Producto incuestionable del fracaso. Y por eso, perdieron la escasa confianza que algún desprevenido les tenía y que se notó claramente en las últimas elecciones del 2021.

Por eso digo que el pueblo votante, que ha quedado eclipsado por las continuas decepciones y las múltiples denuncias contra varios "funcionarios" que duermen en la Justicia, ya debe comenzar a despertar y votar con la cabeza. 

Sepan que se acabarán las dádivas. Y ellos les pedirán por favor una oportunidad más.

Casi con seguridad, de un día para otro y, a pesar de la no muy clara "independencia" de poderes, con nuevo gobernador de otro signo político, los expedientes verán la luz. 

Ellos lo saben. Son cosas muy raras que ocurren en este país. Pero ocurren.

Y ésa realidad, los pone muy nerviosos.

Eso se debe a que cuando uno siembra vientos, seguro, cosechará tempestades.