VIVIENDO EN COSTA POBRE

EDITORIAL

Con las astillas del mismo palo


Por Walter R. Quinteros

El Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina destacaba esta semana que:

El 32,7% de los hogares y 43,1% de las personas se encuentran bajo la línea de la pobreza en el país. 

El 8,1% de la población urbana, en tanto, vive en la indigencia. 

El año pasado, el porcentaje de pobreza fue 42,4%. 

El informe "Pobreza multidimensional y pobreza por ingresos desde un enfoque de derechos sociales. Argentina Urbana 2010-2021" revela un aumento de 0,7 puntos porcentuales en 2022. 

El reporte señala, además, que entre julio y octubre de este año el 5,7% de los hogares y 8,1% de las personas eran indigentes.

El informe "Trabajo, empleo, inactividad forzada y exclusión social. Argentina Urbana 2010-2022", la tasa de empleo subió del 58,8% registrado en 2021 a 64,3 % este año. 

Solo el 40,3% de la población económica logró acceder a un empleo pleno de derechos, mientras que el 8,7% de esta población se encontraba abiertamente desempleada y el 23,0% sometida a un subempleo inestable.

Que el 28,0% contaba con un empleo regular, pero precario, con niveles de ingresos superiores a los de subsistencia y sin afiliación al sistema de seguridad social.

Por otro lado, si en 2021 la tasa de desocupación fue de 9,1%, la posterior reactivación generó que este año la desocupación disminuyera al 8,7%. 

Entre los datos, de la Encuesta de la Deuda Social Argentina de la UCA entre julio y octubre de 2022, se señala que un 50% de la población activa no posee un empleo con plenos derechos laborales.

Los responsables de esta última medición hicieron notar que se puede decir que la pobreza se mantuvo casi igual respecto al sondeo anterior ya que el medio punto de aumento que muestra el índice no es relevante desde el punto de vista estadístico. 

Los responsables de estas políticas públicas podrían llegar a cobrar este mes, un total de $502.000 en mano. La vice condenada cerca de 7 millones.

Con dinero que pudo haberse destinado a otras partidas, hicieron que la indigencia disminuyera. 

Claro, tanto usted como yo sabemos que eso se debe más a la ayuda social del Estado (Planes al por mayor) a los sectores más vulnerables de la población que a un cambio estructural del problema. 

Pero no se les cae otra idea que vaciar al Estado.

Los dos grupos más afectados por el leve crecimiento de la pobreza son los que integran personas de entre 18 y 29 años y los mayores de 60. 

O sea, te cortan las piernas, las manos y la cabeza.

El informe también señala que hubo una mejora en aspectos vinculados a inversión pública en infraestructura urbana y vivienda, a la vez que un deterioro en dimensiones más asociadas con las oportunidades de empleo y la capacidad de consumo de los hogares. 

Con esto quiero decirle que estas cifras y datos son necesarios para que dimensione este grave problema social y económico que tenemos los que vivimos en Costa Pobre.

Es decir que; si miramos el bosque y no el árbol, detrás de estas estadísticas hay personas que padecen los efectos de una gran desigualdad. 

Mire el despelote que armaron los médicos para que veamos esa realidad que nos escondían.

Los militares retirados por ejemplo. Toda una vida al servicio de la patria para percibir chirolitas.

Y sepa tambien que desde octubre pasado el aumento de un 9% en el precio de la canasta básica dejó a quienes perciben la jubilación mínima por debajo de la línea de pobreza.

Primero la gente, decían.

Volvemos al asado, decían.

Te llenaremos la heladera, decían.

Amigo lector, nómbreme uno, uno solo de estos políticos que algo hayan hecho para generar más y mejores oportunidades de trabajo.

Uno solo que haya garantizando a las familias de menores recursos el acceso a una vivienda digna.

A algo digno.

Pero ahí los tienen, sonriendo en afiches. 

Ahi los tienen, hablando de "Fulano, Mengano, o Zutana 2023".

Ahí los tienen, vendiendo torpes ilusiones.

Armando listas de sonrisas forzadas.

Son las astillas del mismo palo.

Para que usted siga sin salir de la trampa de la pobreza. 

Liberando a Barrabás con sus aplausos.

Mientras ellos mejoran su calidad de vida. 

Y usted deambula hurgando en la memoria del basural de las promesas políticas, alguna migaja.

¿Hasta cuándo seremos ciudadanos de Costa Pobre?



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