EDITORIAL
“¿Por qué se deja gobernar por la Cristina?”
Por Walter R. Quinteros
Leyendo al periodista Pablo Hamada de LA GACETA, me llamó la atención el hecho que empieza su nota diciendo que en Twitter había tendencia hacia las palabras “9 de Julio”, “Tucumán”, “provincias unidas”, “Tedeum” y “Casa Histórica” como los temas de mayor relevancia en dicha red social.
Probablemente Pablo es un fiel usuario de esa red, y nos cuenta en su nota, sobre cierta ansiedad del pueblo tucumano por ver en público a "un presidente duramente golpeado después de una de las peores semanas de su gestión".
Minutos antes de que el mandatario pisara suelo tucumano, ocurrieron dos hechos que puso a la provincia de Tucumán, en las pantallas de todos los que seguían los pormenores de la cumbre política que se estaba desarrollando.
1. “¿Por qué se deja gobernar por la Cristina?”
Sepan, amigos lectores, que los chicos no reciben "sobres por pautas", como algunos medios y algunos periodistas para hacer ciertas preguntas o, acomodar respuestas.
La periodista Daniela Ballester de C5N, ahora lo sabe.
—“¿Qué le van a decir al Presidente cuando lo vean pasar?”
—“¿Por qué se deja gobernar por la Cristina?”
El medio periodístico —amigo del gobierno—, que tengo entendido, recibió $120.000.000 el año pasado, les preguntaba a los niños presentes apostados a la espera del presidente por las calles tucumanas, qué le preguntarían al presidente, si tuvieran la oportunidad de conocerlo.
“¿Por qué se deja gobernar por la Cristina?”
La respuesta del niño explotó en todas las redes y grupos de Whatsapp.
Espontánea, inocente, honesta. Conmovedora.
En vivo y en directo, como les gusta a los "porteños", y para todo el país que mira ese canal que transforma en cuento de Hadas, cualquier pavada que diga o haga el oficialismo.
El niño en cuestión, seguramente, será un jóven argentino que no se dejará llevar por la indigna dádiva de recibir un miserable plato de locro político, a cambio de un voto.
Tome, como dicen por acá.
2. Amén.
Una hora antes, monseñor Carlos Sánchez, expresaba al inicio del Solemne Te Deum.
"¡Feliz día de la Patria! ¡Feliz Aniversario de la Independencia Argentina!"
Sánchez recordó que la declaración de la Independencia se concretó "en esta muy digna y benemérita ciudad, en 1816. El 10 de julio siguiente, el primer acto de los congresales fue implorar la ayuda de Dios". "Como desde entonces, también hoy nos reunimos a orar por el país en la Catedral de Tucumán y en las Catedrales e Iglesias de Argentina; para alabar a Dios y darle gracias por nuestra Patria. También le pedimos su bendición, a fin de que la prosperidad, el desarrollo, y la dignidad alcancen a todos los argentinos". Destacó.
"Hoy, nuestra Patria es un Pueblo hambriento, desconcertado, preocupado, herido… En muchas familias falta el pan cotidiano y el trabajo digno. Ha crecido la pobreza. Hay hambre de justicia y dignidad, de respeto y cuidado de la vida en todas sus etapas. Hay hambre de paz social, de respeto a la Constitución y de democracia auténtica. Hay hambre de diálogo, de encuentro y participación para superar divisiones y enfrentamientos. Hambre de verdad, de una educación que ponga en primer lugar a la persona humana, que no imponga ideologías, que conduzca a pensar y realizarse dignamente. Hay hambre de libertad y de una vida más segura y cordial. Hay hambre de confianza y trabajo mancomunado entre todos por el bien de todos. Hay hambre de esperanza y consuelo… Hay hambre de fraternidad y de amor". Señaló.
"Nuestros próceres, nuestros padres y nosotros soñamos con una Argentina mejor. Que hagamos realidad este sueño con nuestro compromiso cotidiano de compartir lo que somos y tenemos… Caminemos juntos buscando la reconciliación y el bienestar de todos, porque necesitamos una comunidad que nos sostenga en los mismos objetivos y en la que nos ayudemos unos a otros a mirar y caminar hacia delante, con esperanza. Salgamos de nosotros mismos y de nuestros propios intereses. Digamos sí a la cercanía y no al aislamiento, sí a la cultura del encuentro, no a la cultura del enfrentamiento. Amemos y sirvamos a la Patria creciendo en fraternidad, promoviendo la amistad social. Es tarea y responsabilidad de las dirigencias de todos los ámbitos, sin distinciones, en especial las autoridades gubernamentales, desde las decisiones en políticas públicas, en favor de todos y de forma especial de los que más sufren". Puntualizó el Arzobispo.
"Nuestros próceres nos han legado una Patria hecha con sangre y sudor, con amor y sacrificio. Ahora la vemos desgarrada por la pobreza, el endeudamiento y la falta de un proyecto de Nación. Queremos una Patria de hermanos…" Finalizó.
Tome, cómo dicen por acá.
En mi humilde reflexión sobre estos hechos, me pregunto qué habrá desayunado el niño de la pregunta sincera, y qué habrá desayunado el arzobispo Carlos Sánchez, para tener la fuerza suficiente de dejar en la lona al arco político argentino y con esas simples palabras, nos alumbren el camino a recorrer.
3. Y banderazo de postre.
Y mientras algunos intendentes díscolos adornaban con "fiestitas truchas" esta Fiesta Patria, aparecieron las manifestaciones planteadas en contra del gobierno que fueron lanzadas desde sectores opositores. Juntos por el Cambio, la Izquierda y Autoconvocados.
Nosotros los que laburamos, como todos los días, mañana tenemos que salir a comprar el pan. No sabemos si el dinero nos alcanzará.
Toda otra noticia relacionada será "pura sarasa" de éste, el peor gobierno que yo recuerde.
La esperanza está.
Es ésa que nos ilumina, que nos aclara el camino a recorrer, y que se asoma en la sonrisa sincera de un niño que el poder político no ha sabido "ensobrar".
O "adoctrinar".
Tome, cómo dicen por acá.
(©Walter R. Quinteros / LA GACETA LIBERAL / Foto: Captura pantalla)
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