SE VIENE LA "GUERRA DE LOS ROSE" LOCAL

EDITORIAL

Y un álbum de nuevas y viejas figuritas para coleccionar

Por Walter R. Quinteros

A diferencia de las otras elecciones, en que los candidatos locales mostraban un rosario de mentiras, donde mostraban todas sus miserias humanas a través de inesperados regalos electorales como colchones, chapas, bolsones, promesas laborales y otras menudencias, faltándoles el respeto a la inteligencia y dignidad de nuestros vecinos en Cruz del Eje, en ésta, apenas teníamos a nuestro intendente, como un lejano tercer diputado suplente, y que no faltó a esa verdad absoluta e irrefutable de aseverar que así se compran los votos.

Los candidatos que hemos votado, son de otro lado, casi que ni conocen nuestros dramas cotidianos. No saben —por ejemplo—, donde queda el pasaje San Ignacio en nuestra ciudad, ni la problemática del sector que lo rodea.

LOS UNOS

Pero aparecieron las nuevas / viejas figuritas festejando como si el triunfo de su partido, o del rejunte de partidos ajenos, hubiese sido propio.

Pero ninguna de esas figuritas nada había hecho. Ninguno de ellos llamó a la prensa, ninguno de ellos armó un escenario y, parado sobre él, se jugó el pellejo para decirnos que también como él, nos juguemos por este o por este otro candidato. Permanecieron en un "cuasi" anonimato. Hasta me negaron un reportaje, antes de esa supuesta noche del domingo de gloria, vaya uno a saber por qué.

Tampoco como habrá visto, amigo lector, ninguno tuvo el coraje de llamar a una conferencia de prensa, les sobró tibieza, tal ves espanto, un miedo escandaloso a dar el primer paso en falso y, de repente con los resultados en mano, armaban caravanas y saltaban y hablaban de "cambios" pero, junto a caras que llevan 30 años tomando de la teta del Estado. ¿Cambios?

Y así, en las horas postreras al triunfo, empezaron las nuevas / viejas incoherencias en los ganadores. 

Sepan —muchachos que quieran prenderse en esta etapa pródiga en milagros venideros—, que están abiertas las inscripciones para darles unas palmaditas en sus espaldas, en una de ésas, los tienen en cuenta para el reparto de suertes.

O, en una de ésas, los mismos de siempre, que se creen superiores, los "manden a dormir". Como haciendoles saber que hay un "pacto que respetar".

Sepan, que no hay peor cosa que acostarse con el cuerpo todo sudado.

LOS OTROS

No le voy a pedir, amigo lector, que sacrifique parte de su valioso tiempo buscando en los "enlaces" de este diario, Editorial / Política / Opinión / Locales, mis opiniones, mis vaticinios, el cúmulo de palabras eléctricas de mis críticas a esta "horrible gestión" que nos gobierna en esta ciudad a lo largo de dos años publicando en internet.

Ya no vale la pena. Ya usted, con su voto, le dió el tiro de gracia a este intendente que buscaba, tal vez fueros, o congraciarse con el benefactor de millone$ para obras, vaya uno a saber.  

Pero en la noche del domingo, los despojos de las ilusiones de nuestro intendente, quedaron esparcidos en los mal llamados "búnker" montados sobre calle Rivadavia y otros puntos. 

En cada rincón de esos espacios partidarios, se lamentaban como un coro de lloronas contratadas en una desconsolada tristeza, su autoritarismo, su negligencia, su desprecio a los ciudadanos y su soberbia que, solemnes, respetaban el prolongado minuto de silencio en el funeral.

Y envueltos en sus pecados, el resto de sus funcionarios, se perdieron en aquella noche del domingo pasado, arrastrando su incapacidad, buscando respuestas en el suelo, y el último en salir, apagaba las luces y cerraba las puertas con cierta melancolía. 

Ellos, en seis años de gobierno, tampoco saben dónde queda el pasaje San Ignacio.

Ni los unos ni los otros saben los nombres de los pasajes de Cruz del Eje y la problemática que los rodea. Si saben, dónde están los cajeros automáticos.

Ni los unos ni los otros pensaron la ciudad, ni antes ni ahora y, según parece, la pensarán sino, no viviríamos las calamidades que tenemos hoy.

Desde mi modesta opinión, los unos, son un matrimonio que duerme en camas separadas. 

Los otros, en cambio, están casados por conveniencia ya que manejan la "caja". No los une el amor tampoco. Y ni la letra de la "marchita" saben.

Esta situación me recuerda a la película "La guerra de los Rose"

En esa película, Bárbara y Oliver son una pareja ideal, una pareja modelo, un matrimonio perfecto con una gran vida social. Hasta que un día todo se desmorona, y es cuando Bárbara se pregunta si podría ser feliz sin Oliver en su vida. Bárbara tiene tan clara la idea que decide comenzar con los trámites del divorcio, por lo que se desencadenará una verdadera lucha de poder, ya que ambos quieren la casa donde viven juntos, por el momento. El abogado que se encarga de su aparatoso divorcio, está "atascado" en medio de todo y quiere ver hasta qué punto están dispuestos a llegar Bárbara y Oliver para conservar su casa. Tanto Oliver como Barbara se comportarán, a veces, como auténticos psicópatas enloquecidos para lograr quedarse con la casa.

Tenemos un año y medio de "La guerra de los Rose", hasta la próxima elección.

Sino ocurre algo antes, que parece estar al caer, de parte de la Justicia lenta que tenemos y nos llegue a cambiar el rumbo de las cosas. El Fiscal tiene la palabra.

Por eso, nosotros, la prensa independiente, nos sentimos parte del reparto de latigazos con que la ciudadanía castigó a los infieles que juraron desempeñar debidamente el cargo. Que juraron obrar en todo de conformidad de acuerdo a los dictados constitucionales, y no lo hicieron. Para nada.

Nosotros, la prensa independiente —de ahora en más—, guardaremos cada gesto, cada palabra de cada uno de los que piden "el cambio" para recordarles a qué tipo de "cambio" se referían la noche del domingo pasado, a los abrazos y saltando. Lo haremos en futuras noches de domingo venideros. 

La Gaceta Liberal mide, por norma, a todos con la misma vara. ¿Vio?

Y le aseguro, amigo lector, que cosas extrañas van a suceder de ahora en más.



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