OPINIÓN / EDITORIAL
Es papá de 5 varones, y desde muy joven se desempeña en el ámbito público
Se llama Alejandro Antonio Ruiz, la última vez que lo vimos fue, fue... Ayúdeme amigo lector. No sabemos qué hace, qué piensa, dónde se encuentra.
Pero es nuestro legislador, le recuerdo.
Decía en su presentación en el portal de Legislatura Córdoba, que "vive rodeado de la naturaleza mas pura del noroeste provincial, donde se respira aire fresco y puro". Y que "Trabaja para ser cada día, mejor persona y dirigente".
Pero no lo vemos, no lo encontramos. No sabemos qué hace.
Dos señoras se destacan en las noticias de los portales informativos del Norte cordobés; A saber: En política, la legisladora de Ischilín, Tania Kishakevich y la fiscal Fabiana Pochettino en temas relacionados a la Justicia.
De aquí, del Departamento Cruz del Eje, solo tenemos noticias de la inoperancia constante, sin prisa pero sin pausas, de nuestros políticos.
¡Cómo han perdido terreno en credibilidad! ¡Cuánto han ganado en desprestigios!
Veamos, sabemos que la confrontación de ideas es una estrategia fundamental para la racionalización de las expresiones públicas.
Sabemos también que una democracia como la que vivimos, presupone la existencia de una pluralidad de voces críticas que debatan sobre el mejor interés para la ciudadanía.
Entonces, también entendemos que los supuestos líderes de los partidos políticos se han convertido en piezas claves para la confrontación electoral que se viene, mentiras más, mentiras menos.
Esta pugna entre ellos, mostraría su auge en los medios de comunicación a través de la propaganda y, que son los partidos políticos los responsables de incentivar la discusión racional en su modelo de comunicación y, con ello, la de motivar en el ciudadano un interés por la participación y legitimación democrática.
Pero si están imputados unos, callados los otros y desaparecidos algunos, tenemos con que el espacio público de los ciudadanos se constituye en el ámbito de expresión de la política, y en él, las discusiones públicas de bares y otros lugares, tienen que ver con la "mala praxis" de estos políticos que son los únicos en este contexto, que no quiebran económicamente.
Mis preguntas son las siguientes:
¿Qué ha pasado con los discursos de "acción social" que pregonaban?
¿Qué ha pasado con sus promesas de trabajar para una sociedad cruzdelejeña mejor?
Respuesta: Nada.
Los discursos que escuchábamos, pasaron a ser una vieja canción que alguna vez estuvo de moda, mucha música y poca letra. Pero no volver a escucharlos hablar, a mencionar algo, como pedir alguna disculpa y, lo que es peor, a desaparecer de la vida pública, ha tensionado el equilibrio del orden establecido en la sociedad.
La relación está rota. Porque el silencio que esgrimen, nos hace pensar que algo ocultan. O que no tienen la solvencia moral para mirarnos a los ojos.
Miremos más allá de Pozo Cavado.
Se asfalta una calle en Ischilín, la legisladora Tania, presente. Un Banco para Quilino, Tania presente. Un vivero para Quilino, Tania presente. Un curso para albañiles, Tania presente, y así sucesivamente, desde controlar cómo pintan una pared de una futura subcomisaría, hasta pedir que se inspeccione cómo funciona la Departamental de Policía. Legislando como sea, y la ciudadanía viendo que trabaja, informando a la sociedad. Aunque para algunos venda humo, Tania presente, la encontramos en todos los portales, hasta en YouTube.
Le cuento amigo lector, en Dean Funes, le exigen cada vez más a la legisladora y hacen cola para contarles las costillas al intendente y falta así de poquito, para que tengan un brillante Parque Industrial que va a dar empleo a decenas de personas.
Por otro lado, si a alguien se le escapa un tiro, o hay un delito cualquiera, por más intrigante o doloroso que sea, a los diez minutos aparece la siempre predispuesta fiscal Fabiana Pochettino, informando. No se le escapa una, comunica con minuciosos detalles.
De Pozo Cavado para acá.
No hay un medio informativo que sepa algo sobre nuestro desaparecido legislador, ni en las fotos aparece, y eso llama la atención. Ni como por esa pegadiza costumbre, que algunos dicen y escriben que les llama "poderosamente" la atención.
Vemos entonces que da buen resultado la habilidad política de "insertar" algunos bolsones y otras especias entre los votantes de escasa instrucción, pero trae estas consecuencias.
Esos "donativos" a cambio de un voto, posicionan a un supuesto líder que deja de serlo en el preciso instante que proclama jurar su cargo.
Pero tampoco he escuchado, aquí en Cruz del Eje, a ningún político de la oposición que haya pedido hacer uso de la palabra. ¿Tanto les cuesta hacer uso de la palabra?
Ni a escribir un manifiesto cuya lectura no nos abrume, sin esperpentos, ni haciendo uso de un buen lenguaje, donde expusieran de una manera amplia y detallada, cuál es su versión de los acontecimientos que marcan estos días presentes y pasados.
No he escuchado ningún discurso que tenga un contenido que abarque todo el mandato del actual intendente, ni del legislador ausente.
Y mire que se generaron situaciones. Hasta tuvo que intervenir la Justicia —fiscal Fabiana Pochettino, precisamente—, y que se dieron en el contexto de situaciones críticas, como por ejemplo las llamadas "emergencias", medidas que han sido muy debatidas y muy cuestionadas por toda la sociedad.
Pero nada, nada de nada. Impera por esta tierra un silencio llamativo y anormal.
A veces, nos tiran una fotito con una enfermera colocando vacunas, o una fotito con empleados colocando tijolos y adoquines por una calle donde viven amigos y nada más. Sin explicar el por qué, el para qué, la importancia que esa fotito se merece.
¿Era de esperar que así sucediera?
Por un momento, antes de empezar esta nota, pensé que esta población necesitaba una explicación de los principales actores: Del intendente silencioso, de los opositores mudos, y del legislador desaparecido.
Pero ¿Y el sentido común?
¿Y los sesgos emocionales o ideológicos de cada partido?
Entonces, ¿me quedo con la certeza que este es un pueblo con pésima memoria?
¿Me tengo que conformar que han olvidado sus puebladas?
¿Tengo que preguntar si se han olvidado de aquellos oradores improvisados en la lucha por el "no" al basural, por el "no" a la falta de trabajo, al abusivo costo de la electricidad, a la falta de agua, a la falta de industrias, el que cortaba rutas?
¿Qué pasó de aquel pueblo que reclamaba justas medidas a un gobernador?
¿Será que ahora se conforma con mirar macetitas con flores en un bulevar?
Volviendo al legislador desaparecido —que ojalá aparezca algún día, le conozcamos la voz, y con ganas de contestar ciertas preguntas—, como ésta por ejemplo:
¿De qué podemos sentirnos orgullosos los cruzdelejeños, gracias a su gestión como legislador?
Porque, eso que le gusta el aire fresco y que quiere ser cada día mejor persona, ya lo sabemos.
(Walter R. Quinteros / La Gaceta Liberal / Cruz del Eje)
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