LOS EVANGÉLICOS SE POLITIZAN

 SOCIEDAD / POLÍTICA

Partido evangélico desembarca en Córdoba y va por una banca

Por  Yanina Soria

MASFE se lanza mañana con intenciones de jugar en las legislativas. Lo conducirán mujeres que dicen representar a unas 200 iglesias y llegar a un universo de unos 400 mil fieles. El movimiento ya existe en Mendoza, Buenos Aires, Jujuy, Tucumán y Misiones. No descartan alianzas.

Lejos de ser un hecho aislado e inconexo, el desembarco de un nuevo partido evangélico en la provincia forma parte de una estrategia más amplia y regional, que busca ubicar a “hombres y mujeres de Dios” en el sistema político argentino.

“Queremos ver a los justos gobernando” dicen desde el movimiento religioso que desde mañana tendrá base también en Córdoba.

Y mientras las elecciones de medio término parecieran ser la instancia ideal por donde arrancar, la provincia mediterránea resulta terreno fértil para la expansión de un espacio que ya moviliza a cientos de miles de personas.

Mañana será el lanzamiento oficial del Movimiento de Acción Social Federal (MASFE) en Córdoba, un partido político con epicentro en Mendoza donde cuenta con representación legislativa a través de la banca provincial que ganó el pastor Héctor Bonarrico, presidente además de la fuerza a nivel nacional.

Sin embargo, no es el único distrito donde existe MASFE ya que el partido cuenta también con filiales consolidadas en provincia de Buenos Aires, CABA, Jujuy, Tucumán y Misiones.

Y ahora es el turno de Córdoba. En esta provincia tendrá la particularidad de que el movimiento será liderado por dos mujeres: Alejandra Páez, pastora del Templo “La Hermosa” de barrio Cárcano, y la presidenta de la Fundación Madres Incansables, Verónica Narvae.

Pero, además, otras 80 pastoras formarán parte de la estructura institucional que pretende desde el jueves dar un paso más allá y meterse de lleno a la arena política local. Entienden que sólo así podrán transformar la realidad de los cordobeses con los que a diario trabajan.

El objetivo de MASFE Córdoba es consolidar el armado territorial que ya dicen tener como iglesia evangélica para pelear este año por uno de los nueve lugares que la provincia pone en juego para la Cámara Baja.

El cálculo inicial que las alienta a soñar con que alcanzar una banca propia en el Congreso no resulta descabellado, es que dicen aglutinar hoy a unas 200 iglesias en toda la provincia alcanzando así a un universo de unos 400 mil fieles que contabilizan como posibles votos.

Se definen como un partido independiente que, por ahora, no tiene conexión con ninguna otra línea política evangélica ni tampoco con los partidos tradicionales de Córdoba, y aseguran que se presentarán a las legislativas con lista propia.

Sin embargo, renglón seguido aclaran que no descartan formar algún tipo de alianza política a futuro siempre que eso suponga mejorar las chances reales de alcanzar lo que buscan.

En ese sentido, por el trabajo social que ya desarrollan en unos 40 barrios de Córdoba y por las banderas que levantan, existe puntos conectores con el peronismo cordobés. Hacemos por Córdoba calificaría como posible aliado. De cualquier modo, por ahora, la apuesta es avanzar con lo propio y sacar al evangelismo cordobés de la escala espiritual para llevarla al terreno de la acción política concreta.

“Sueño con una Córdoba justa e igualitaria, que defienda la vida y la justicia social. Nosotros hace 20 años que venimos trabajando en la capa más baja de la sociedad, a donde no llega nadie, hacemos un trabajo de asistencia social en los barrios como no lo hace ningún gobierno, pero no podemos completar nuestro trabajo porque nos faltan herramientas. Por eso, queremos meternos en este juego”, definió a Alfil la pastora Paez.

La mujer que preside la iglesia principal del movimiento, dijo que como evangelistas se sienten excluidos de la ayuda estatal y que por eso buscarán el desembarco parlamentario.

Asegura que representa los intereses y necesidades no sólo de quienes profesan su mismo culto, sino también de otros vecinos de Córdoba que, en tiempos de pandemia, se acercaron a buscar ayuda. “No vamos con promesas, vamos con acciones” anticipa como slogan de campaña.

Por su parte, Verónica Narvae que completa el binomio que conducirá MASFE en Córdoba, está actualmente está a cargo de tres Salas Cunas y cuatro merenderos en Córdoba.

Allí radica, dicen, su principal activo: el trabajo territorial y la red armada entre las iglesias de distintos barrios de la Capital que se extiende hacia el interior.

(Alfil)

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