NO CUALQUIERA SE LLAMA WALTER

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La gente ya ni come para ver a Walter Gómez


Por Walter R. Quinteros

El tipo se llamaba Walter Gómez Pardal, había nacido en Montevideo, Uruguay, el 17 de diciembre de 1927. Falleció en Vicente López, Argentina, el 4 de marzo de 2004. Mi viejo lo adoraba como nosotros a Maradona o a Messi. Un amor asi le tenía a este futbolista uruguayo, que jugaba como delantero. Había salido campeón con Nacional en 1946 y 1947 y obtuvo los torneos argentinos de 1952, 1953 y 1955 con River. 

De las tribunas bajaba el cantito: “La gente ya ni come para ver a Walter Gómez”.

Si señores ése era el canto de la hinchada de River Plate cuando el uruguayo Walter Gómez salía a la cancha. 

El sitio Wikipedia nos dice que Walter Gómez fue uno de los futbolistas más extraordinarios de todos los tiempos. Que descansa enterrado en el cementerio de Lomas de Zamora, Buenos Aires. Que tenía 76 años cuando falleció y que había llevado una vida modesta. 

Que su carrera futbolística comenzó en Central, pasando luego a Nacional donde se convirtió en ídolo y deslumbró con su juego. Pero golpeó a un juez en un clásico y eso lo alejó tanto de los tricolores como de la selección nacional, no pudiendo integrar la selección del ’50 responsable de la gesta de Maracaná. 

En River Plate también fue ídolo, coronándose campeón en 1952, 1953 y 1955, año en que dejó el club en el cual jugó 140 partidos y convirtió 74 goles. Fue con los “millonarios” que logró un récord que aún ostenta: marcó cuatro goles en 21 minutos ante Lanús. 

Por eso, señoras y señores mi padre no dudó en llamarme Walter.

El periodista Carlos Viacava también nos habla de Walter Gómez, dice que en el año 1955, los de Ríver ganaron el título varias fechas antes y una jornada antes del cierre del torneo se dieron el gusto de vencer a Boca por 2-1 en la Bombonera, pero, en una muestra de caballerosidad deportiva, decidieron no dar la vuelta olímpica en la cancha de su tradicional adversario. 

Nos cuenta que "los millonarios" tenían un juego arrasador. Santiago Vernazza, Sívori, el fantástico uruguayo Walter Gómez, Angel Labruna y Félix Loustau (los dos últimos, sobrevivientes de La Máquina que maravilló entre 1941 y 1946) le dieron vida a una de las versiones más recordadas de La Maquinita, que durante esa década tuvo célebres integrantes como Eliseo Prado, Norberto Menéndez y Roberto Zárate. 

Es decir que, el año en que nací, señoras y señores, la hinchada de Ríver cantaba: “La gente ya ni come por ver a Walter Gómez”.

River, en el 28º capítulo de aquel torneo, dos antes del epílogo, estiró la diferencia a cinco puntos respecto de Boca, y definió el campeonato. Ese día aplastó 5-2 a Vélez y con cuatro unidades en juego, ya nadie podía alcanzarlo. La penúltima fecha puso otra vez cara a cara a los dos conjuntos más populares de la Argentina. Boca se puso rápidamente en ventaja con un gol de cabeza del delantero Carlos Etcheverry.

En el complemento, River consiguió dar vuelta el resultado con un minuto de suprema eficacia. “La gente ya no come por ver a Walter Gómez”, solían cantar los hinchas en tiempos en los que el centrodelantero brillaba a pleno. Y el uruguayo demostró su talento habilitando a Labruna, quien definió ante la salida de Julio Elías Musimessi. Apenas 60 segundos más tarde, le tocó al autor del primer tanto abrirle el camino del gol al Mono Zárate. “Lo nuestro fue una táctica. En el primer tiempo los cansamos y en el segundo los liquidamos”, aseguraba el pícaro, Labruna. 

Fue el 9 /12/55, miren que coincidencia con el 9 /12/18. 

Los millonarios festejaron su conquista, pero no dieron la vuelta olímpica. Labruna, como capitán, impidió la efusiva celebración. River levantó los brazos, saludó y se fue. 

Calculo que, allá lejos y hace mucho, mucho tiempo mi padre, con una amplia sonrisa, me anotaba en el Registro Civil con el nombre de Walter.

Creo ver a mi madre, meciéndome en sus brazos, señalarle al funcionario mi segundo nombre,
Ricardo, se llamará Walter Ricardo. 

Y ése, ese es un gran secreto querida vieja, que te llevaste al cielo. 

(La Gaceta Liberal)

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