OPINIÓN / LOCALES
No de lugar a que yo escriba que...
Al señor intendente de Cruz del Eje, Claudio Farías
No es mi intención que esta carta tenga los propósitos de sugerirle, ni de expresar algún tipo de decepción, ni de protestar, ni de condenar, mucho menos de agradecer o de reconocerle algo. No, nada de eso.
Es simplemente el de hacerle saber que parece que, como al partido político que usted representa, intendente, usted es un político amante del poder total.
Es autoritario, mentiroso compulsivo y, un maestro en la charlatanería, aunque solo sea para ganarse el apoyo incondicional de sus fanáticos seguidores. De nadie más.
He notado que en estos días, ha estado jugando a las escondidas, ya no llama a sus radiodifusores amigos para liberar sus ocultas expresiones de deseos. Todo le ha salido al revés, El secretario de Obras Públicas de la Nación, lo desconoció, aunque usted le arroje culpas a la pandemia. Ya nadie le cree nada.
Es más, ya ni sabemos quiénes integran su devaluado gabinete, porque ni siquiera tiene la gentileza de avisar a la prensa.
Tal es así, que últimamente mandó a hablar a sus Secretarios sobre proyectos y obras y cosas inentendibles para el ciudadano común y, lamentablemente, los mismos eran reporteados por locutores que, debido a su trabajo y ocupación, casi desconocen algunos manuales, sobre preguntas, repreguntas y las temibles contra-respuestas.
Pero al menos informaron, aunque sin llevar al interlocutor de la mentira a la verdad.
Fijese que solo aparece con un muy pequeño comunicado en la página oficial que tiene la municipalidad en una red social. Lo hace pensando que con eso, evita el temible micrófono independiente. Donde creo, existen para usted, poderosos enemigos que le pueden llegar a refrescar la memoria de sus promesas fallidas.
Y, casi de esto no me caben dudas, llama a sus seguidores para que lancen acusaciones, chismes y mentiras sobre quiénes ponen en duda la honestidad de sus acciones. O, corta la pauta propagandística de sus "acciones" a los rebeldes. Me lo imagino inventando teorías de conspiraciones en su contra, mientras que, en realidad, la gente quiere que de una vez, usted no mienta, y se dedique a trabajar de intendente. Basta con leer los comentarios en las redes.
¿Es mucho pedir?
Si usted, intendente Claudio Farías, se diese un baño de franqueza para con su pueblo y, dijese sin la soberbia que lo acompaña siempre que, en realidad, le interesa ahora ser elegido legislador. Que ya tiene solucionado sus problemas económicos y de vivienda y que, ahora le toca al pueblo un poco del reparto de su suerte y preguntase; Bueno ¿Que necesitan?
Si, a ese baño de franqueza le agrega un toque de honestidad, nos contaría a todos, a través de los canales correspondientes, todo, absolutamente todo, lo que se le viene reclamando que presente y difunda. No está demás recordarle que deslegitimó la Carta Orgánica, pero tampoco su accionar es acorde a la Ley de Municipios 8102. Ni siquiera responde a los cuestionamientos de la bancada opositora y, creo que a la suya tampoco, ya que los maneja como escuálidos títeres que sólo sirven para levantar la mano aprobando sus caprichos, y que le bajan el pulgar al pedido justo y necesario de la oposición.
Y ya sabemos bien como funciona eso. Ya sabemos todos qué esconde eso.
También le aclaro que, si nosotros, los ciudadanos comunes y, los responsables o, quienes cumplen funciones en otras Instituciones, le recordaríamos que éstas, están por encima de su cargo temporario. ¿Qué pasaría?
Los liderazgos importan, señor Claudio Farías. Un líder contagia sus ideas y valores, la pregunta es ¿Cuáles son sus ideas? ¿Cuáles son sus valores?
Si no hubiese existido el lema "Yo lo voto a Juan", donde se colgaron todos los candidatos a intendentes y jefes comunales de "Hacemos por Córdoba" y, tanto bueno como malo, de haber existido un contrincante de peso en algún partido opositor ¿Que nivel de liderazgo hubiese conseguido? Seguramente, su proceder hubiese sido distinto.
Con esta cuarentena el poder se le escapa de las manos, aflora ahora toda su incapacidad para mantener la ciudad habitable. Ahora miramos escépticos esas palmeras en rotondas y bulevares que en nada embellecen la ciudad. Ni hablar entonces de los otros ingresos a la ciudad adornadas con bolsitas de plástico. Como también fuimos escépticos a sus frases de "vamos a poner cisternas en los barrios" de, "vamos a asfaltar 40 cuadras" y del "octubre habrá gente trabajando en la ruta, en el camino al dique y en la ciudad". Le recuerdo que está por terminar noviembre y, nada.
Para graficar su ineficacia, sepa que "Las macetas y las lucecitas" no pueden cubrir la inoperabilidad que ostenta usted y todo su gabinete.
Los líderes, los auténticos líderes, no son los que se sacan fotos en la ruta haciéndose los machos. Los líderes son aquellos que han tenido la elemental decencia de saber contemplar las necesidades de su pueblo y de saber respetar las instituciones para convertirse en el guía.
De saber que ha "pensado la ciudad" para el ciudadano y, que no se ha "colgado" de programas sociales ni coparticipaciones de la provincia o de la Nación como única "acción".
Al turista, si es que viene uno, no hay que esperarlo con un "taller de bioseguridad" solamente. Usted le tiene que mostrar una ciudad limpia y ordenada, con las calles señalizadas, entre otras cosas, por usted olvidadas, despreciadas.
El turista, si viene, no viene por la capacidad hotelera, que es escasa. Viene también a visitar familiares, que pueden vivir éstos, en barrios a los que usted le ha dado la espalda. Ningún turista va a venir a ver el Club Náutico ni las palmeritas ni las lucecitas. Va a mirar que a la ciudad de 45.000 habitantes, le recogen la basura día por medio en calles llenas de baches.
Y no creo que este pueblo, que este honorable pueblo de Cruz del Eje. le pida a usted solamente la joda, la música de cuarteto, por encima de los cordones cuneta, por encima de la limpieza, por encima del mantenimiento, por encima de -insisto-, respetar las Instituciones.
Sepa que necesitamos referentes que no nos mientan, que muestren los papeles, base de toda confianza. Necesitamos buenos ejemplos a imitar, no imputados ni sospechados. Porque no pierde usted, que ya está en la lona, sepa que arrastra a un profundo precipicio a la ciudad que debe administrar y, si no lo sabe hacer, perderemos todos los que aquí vivimos.
Hoy es mi cumpleaños, regáleme un reportaje, muéstreme los balances de su gestión.
No de lugar a que yo escriba que, "usted no se animó".
Walter R. Quinteros / La Gaceta Liberal
Comentarios
Publicar un comentario