CRUZ DEL EJE: SOSPECHOSA FALTA DE INFORMACIÓN

OPINIÓN / Por Walter R. Quinteros

Consolidar la democracia


La imagen puede contener: 1 persona, de pie



Sabemos que la democracia necesita principios y técnicas para la organización del poder y para la relación entre gobernantes y gobernados. (Recuerdos de la Materia: Educación Democrática, de Zuretti-Peñaloza, si la memoria no me falla, en el ciclo básico que cursé entre 1969 y 1970 con 9 de promedio, E.N.E.T N° 1 de Cruz del Eje y en 1971 en Córdoba)

Entonces tenemos que; Para consolidar la democracia es necesario organizar el Estado de acuerdo con el Derecho, es decir, que tanto gobernantes como gobernados deben estar subordinados a las normas que indican cuáles son los límites de cada cual.

Uno de los principios del Estado de Derecho es la publicidad de los actos de gobierno.

Porque los gobernantes son mandatarios de la ciudadanía, por consiguiente, los gobernantes deben actuar de conformidad con sus gobernados en cuanto a la responsabilidad de sus actos, a la transparencia de los mismos y a las rendiciones de las cuentas.

Si, usted considera que no le queda claro, vuelva a leer.
Porque esto no es otra cosa que consolidar la democracia.


En un artículo anterior, supe emplear una frase de Juan Rulfo que siempre referenciaba al tiempo, "mucho antes", "mucho tiempo". En su obra "Juan Páramo", Rulfo dice: "El padre Rentería se acordaría muchos años después de la noche en que la dureza de su cama lo tuvo despierto y después lo obligó a salir. Fue la noche en que murió Miguel Páramo". 

Supo decir García Márquez, que esa frase lo impactó y comienza sus "Cien años de soledad" con esta maravilla: "Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo".

Y ya que estamos, mire que tan importante para las letras castellanas esta frase por demás célebre con la que Cervantes inició "El Quijote": "En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor".

Con la mala costumbre de no ir a buscar los archivos y, abusando siempre de mi memoria, empezaba mi artículo diciendo: "Mucho tiempo después, parado frente al pelotón de fiscales, el intendente de mi pueblo, había de recordar aquella tarde remota, en que le enseñaron a hacer los balances".


Hago referencia a esto, porque parece, que el hecho de dar o no dar, al conocimiento del público, un determinado acto de gobierno, ha sido considerado como una potestad ubicada dentro de la esfera de "discrecionalidad" que creen tener los gobernantes de turno.



Algunos parecen desconocer los alcances de la Ley 27.275



Algunos intendentes, parecen desconocer que la información pública le pertenece al pueblo, que es propiedad de los ciudadanos. Si la información es un mecanismo para controlar a los gobernantes, no pueden ser éstos —los controlados—, los que decidan cuándo y cómo se accede y activa este control. Jamás.

Sepamos que, la ciudadanía puede y debe participar en el proceso de toma de decisiones públicas y controlar la gestión de gobierno. Para que eso suceda, es necesario contar con la información y, la ley de acceso a la información, cambia de raíz la cultura que tienen los gobernantes y funcionarios públicos de contestar con un "no" fácil, frente a la requisitoria de transparencia y rendición de cuentas por parte de la ciudadanía.

Tenemos el derecho a saber sobre temas como: Informes de impacto ambiental, organigramas de oficinas públicas, nóminas de empleados, presupuestos, estadísticas oficiales, documentos que han servido de base para la toma de una decisión, que dinero cuenta la "caja chica", planes de trabajo, estado de la flota automotor, horarios, contratos, etc. son algunos de los ejemplos de lo que un ciudadano puede solicitar por escrito, o por medio digital, sin otras formalidades y gratuitamente, a funcionarios de cualquier órgano perteneciente a la administración central, o descentralizada, de entes autárquicos, empresas y sociedades del Estado, o de sociedades anónimas con participación estatal mayoritaria, sociedades de economía mixta y todas aquellas otras organizaciones empresariales donde el gobierno municipal tenga alguna participación.

Pero también, se puede solicitar información al Poder Legislativo y al Poder Judicial en cuanto a su actividad administrativa, amplía la Ley 27.275

Sepamos que, si no se facilita esta información en el plazo de 15 días hábiles, el funcionario que la deniegue, habrá incurrido en falta grave y se hará pasible de la correspondiente sanción y, el solicitante de la información podrá recurrir a la Justicia ejerciendo una acción de amparo.

Si todavía no sabemos el plan de trabajo anual de cada Área, si aquí en Cruz del Eje, no está la información pública de los funcionarios responsables, es que no tienen conocimiento de la Ley o, porque creen que nosotros somos unos giles bárbaros. O creen que, pedirles que den a conocer un balance, es ponerles palos en las ruedas. Vaya uno a saber qué piensan.

El límite establecido, es la prohibición de suministrar información que afecte la intimidad de las personas, la obtenida en carácter confidencial o protegida por el secreto bancario y secreto profesional, y las notas internas que no formen parte de los expedientes.

Lógicamente, nadie va a preguntar que marca de cigarrillos fuman en la municipalidad, que médico de cabecera los atiende, y dónde compran las "pilchas" las/los  amantes de turno si es que los hay. Ni nada que pueda perjudicar un secreto que nos haga perder una guerra  de "atrapa turistas" contra Punilla, Traslasierra o Calamuchita. Valles que hoy "tiritan" de miedo porque tuvimos 216 visitantes este verano.

Y si le prestan atención al "espíritu" de esta Ley, verán que beneficia a los gobernantes, porque la vigencia de esta ley, los obligará a organizar la información; las instituciones se enriquecerán y legitimarán con la opinión ciudadana y finalmente, la transparencia incrementará la credibilidad de sus gobiernos. No de su propaganda, que es otra cosa.

Por otro lado, la ciudadanía informada, se verá beneficiada porque podrá usar una ley acorde con la democracia moderna y acabaremos en algo con el maldito "chusma chisme del parece que le dijeron que dicen que dijo", largando hilo en las sospechas habituales.

Nuestra democracia exige la vigencia plena de los derechos y, uno de ellos debe permitirnos usar las herramientas para una permanente fiscalización de las instituciones. No debemos caer en que "ya voté, ya cumplí".

No. La sola posibilidad de elegir a través del voto, no nos permite como ciudadanos, el considerarnos que fuimos parte del proceso electoral y ya está. No, debemos participar en la toma de decisiones y debemos tener alternativas de control sobre el desempeño de aquellos que resultaren elegidos.

Reza una frase que nos marca como enunciado principal de este medio, y que estuviera impresa en La Gaceta, de Mariano Moreno: "El pueblo no debe contentarse con que sus jefes obren bien, debe aspirar a que nunca puedan obrar mal". 

Por eso, la política, o mejor dicho, los políticos,  no fueron elegidos para producir defensores complacientes de algunas de sus ideas, ni tampoco, para crear consumidores pasivos de algunas soluciones políticas que tengan a mano. 


Y está a la vista.

Y usted, amigo lector sabe que hay varias fotografías que muestran a nuestros intendentes y a nuestros  legisladores, con servicios que no se cumplen y con alumbrado, calles y plazas destrozadas, en sus municipios pero que, lo mismo promueven un festival para, subir ellos a los escenarios y levantar las manos emulando a ciertos y lejanos dictadores, en un ataque salvaje por sumar prosélitos y, como diciéndonos, «me deben esta joda, aunque ustedes hayan pagado la entrada, ésta es mi gestión, aplaudan ché». 

Pero usted vaya, ciudadano o medio informativo no "comprado" o sin pauta publicitaria oficial, a pedirles el balance definitivo de esa "joda", o esa fiesta y, que le expliquen de qué partida presupuestaria, nacional, provincial o local, salió el dinero para organizarla, en tiempos de "Necesidades y Urgencias".

Tal vez, alguien le conteste algo así como: "Le voy a contestar con cultura a un hombre culturoso, sepa que 'lo esencial es invisible a los ojos...'" O esta otra, en modo buscapleitos: ¿En qué lugar de la Carta Orgánica dice que el escenario de los festivales es solo para los artistas, eh?" O esta otra mucho más común; "A la gente le gusta esto, no quiere calles arregladas, quiere esto".

Aprendan, damas y caballeros, lo que es una respuesta del "relato", para menospreciar nuestra inteligencia.

Debemos siempre tener en claro que los ciudadanos respondemos cuando las políticas públicas se piensan en función de nuestras necesidades. Y eso no lo aplicamos, porque no estamos informados, nos ocultan el patrimonio, el balance y el inventario.

O porque "habremos de recordar aquella tarde remota en que nos dieron junto al voto, un bolsón, una chapa de cinc, y la promesa de un puestito en una oficinita cualquiera, donde conoceremos la hoja A4, la impresora color y además, podremos chatear tranquilos".

Para cerrar: Esta ley —que no le conviene a ellos que la sepamos y practiquemos—, creó también órganos garantes. Por ejemplo, la Agencia de Acceso a la Información Pública que es quien se ocupa que; la administración pública central, (O sea el Poder Ejecutivo Nacional) la otra, la descentralizada y, las empresas del Estado entre otros, la apliquen correctamente.

Y ¿En Cruz de Eje?

Walter R. Quinteros / Quiénes & Porqué / Foto: Festival en Cruz del Eje / Serrezuela

Comentarios