¿COMIENZA LA CALMA EN CHILE?


Chile protestas

Luego de un mes de violentas protestas en Chile, que dejan 22 muertos, miles de heridos y detenidos y anuncios que han sido considerados paños de agua tibia frente a la crisis social y económica, el país está ante el panorama de un cambio histórico de Constitución, aunque aún no es claro si esto alcanzará para calmar la furia en las calles.

La propuesta de la nueva Constitución fue fraguada en una larga jornada en el Legislativo que acabó en la madrugada de ayer con un acuerdo entre oficialismo y oposición en el que se aprobó la hoja de ruta de un proceso constituyente.

Fue un enorme acuerdo que les permitió a las diferentes fuerzas políticas conversar, dialogar, hacer presente sobre el odio (y) la prepotencia, el diálogo (y) la democracia”, dijo ayer la vocera oficial Karla Rubilar.

El pacto reunió a gran parte de las fuerzas políticas del país, a excepción del Partido Comunista, que horas después, sin embargo, confirmó que participará en el plebiscito por una nueva Constitución.

De hecho, la sociedad venía reclamando por una nueva carta magna que acabe con la actual (1981), heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y considerada por muchos como el principal origen de la desigualdad social existente en Chile en los últimos 30 años.

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, había descartado desde un principio la idea de una Asamblea Constituyente, como lo exigían la oposición, varias organizaciones sociales y los manifestantes, que además quieren que se haga con una “amplia participación ciudadana” para garantizar la “legitimidad” del nuevo texto.

Pero ante la presión en las calles, el mandatario ha tenido que abrirse a un eventual cambio constitucional que podría afectar los intereses económicos de su electorado, particularmente sectores muy conservadores, o en gran parte privatizados, como la salud y la educación.

El pacto político les permitirá a los chilenos votar si el órgano encargado de modificar la carta magna es una Asamblea Constituyente, una idea que ya había surgido en el debate de la campaña electoral del 2013, cuando un movimiento de la sociedad civil bautizado ‘Marca tu voto’ invitó a los electores a escribir la mención ‘AC’ (por Asamblea Constituyente) en su boleta electoral.

Fuente: Redacción Internacional / EL TIEMPO /


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