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¡Chusma, chusma, chusma!
Por Walter R. Quinteros
El papa Francisco, a veces, suele realizar pedidos a la población de distinta índole.
Entre otras, pidió: "Una solución justa y pacífica" para superar la crisis de Venezuela. A esta hora, tropas leales al presidente Guaidó, liberaron al líder opositor Leopoldo López y el ministro de Defensa anuncia a los medios que "No, no pasa nada". Mientras tanto la base aérea "La Carlota" se encuentra tomadas por militares contrarios al régimen de Maduro.
Chisme del día: Los soldados leales a Guaidó llevarán una cinta azul. Los soldados leales a Maduro, una cinta roja.
El papa Francisco llamó a terminar con "injusticias, abusos y violencia" en el mundo.
Pero no dijo de empezar por todos sus sacerdotes que están en la mira de la justicia.
En el mundo hay centenares de miles, por no decir millones, de personas (casi todos hombres) condenados o acusados de pederastia. La pederastia es una plaga, un mal que, finalmente, la sociedad actual decide combatir. Sin embargo, hay lugares donde la pederastia es tolerada.
Varios países tienen incluso registros oficiales con los nombres de los condenados, los cuales tienen prohibido trabajar con niños. En dichos registros, la gran mayoría son hombres (más de un 90 por ciento), según datos no oficiales de Naciones Unidas, consultados por el sitio Aleteia. Son por lo general, familiares de las víctimas (la mayoría) profesores, educadores, trabajadores en centros deportivos, homosexuales, trabajadores de ONG, proxenetas, traficantes de niños, monitores, voluntarios en trabajo con niños y también sacerdotes católicos y de otras confesiones cristianas, así como budistas, musulmanes y otros.
Chisme del día: Haz lo que yo digo y no lo que yo hago.
El último de sus pedidos llamó la atención por su peculiaridad. Según el diario Perfil, el lunes 29 de abril, al recibir a peluqueros, barberos y esteticistas de diferentes agrupaciones en Italia dedicadas a su patrón, San Martín de Porres, (andá pelate esa porra, me decía mi abuela) el Pontífice les indicó que eviten caer en la tentación del “chusmear” en su trabajo.
O sea, no encender radiopasillo.
En la audiencia, Francisco les recomendó a los peluqueros: “Ejercer vuestra profesión con estilo cristiano, tratando a los clientes con amabilidad y cortesía y ofreciéndoles siempre una buena palabra y ánimos, evitando ceder a la tentación del chismorreo que fácilmente sucede también en vuestro contexto laboral. Todos lo sabemos”.
Así se expresaba el papa, mientras envolvía en papel de regalo, un rosario por él bendecido, para Amado Boudou, el ex vicepresidente que llegó a tener hasta 54 causas abiertas en la Justicia federal. La mayoría, más de 30, fueron cerradas, como ocurrió con la famosa denuncia por las reformas a su oficina del Senado con jacuzzi jncluído. Pero otras seis causas siguen en pie, con más evidencias, y que todavía pueden afectar al funcionario:
Enriquecimiento ilícito, el caso Ciccone etc. etc.
Además, les reclamó a los integrantes de las distintas asociaciones que actúen con rectitud en su trabajo para contribuir de esta manera al bien común de la sociedad.
O sea: Chisme de peluquería:
—Aquel no es recto en su trabajo.
—Ya me parecía, mirá cómo me cortó.
El papa Francisco a los peluqueros: "Eviten ceder a la tentación del chismorreo que fácilmente sucede también en vuestro contexto laboral. Todos lo sabemos"
El líder religioso siempre se mostró contrario a los chusmerios y en sus discursos y reuniones lo manifestó en más de una ocasión. Por ejemplo, en enero del año pasado durante su viaje a Perú en un encuentro con monjas locales dijo que "el chisme es como una bomba" y les aconsejó a las religiosas "morderse la lengua".
Si supiera la cantidad de chistes y chismes de monja que tengo en mi PC...
En noviembre del 2018, durante su catequesis en una audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro, Francisco comparó el chusmear con el terrorismo y la lengua con un arma. "Los chismosos y las chismosas son gente que mata a los demás, porque la lengua mata, es como un cuchillo. Tengan cuidado, el chismoso y la chismosa es un terrorista, tira la bomba a los demás y se va tranquilo", expresó.
Entonces tenemos que el chisme es algo así como, mentir, porque es algo que no puede ser afirmado con completa certeza que sea lo que el nombre expresa.
“No darás falso testimonio contra tu prójimo” (Ex 20, 16).
“No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos” (Mt 5, 33).
Y también tenemos que: El falso testimonio y perjurio: Son afirmaciones públicas contrarias a la verdad. Ante un tribunal viene a ser falso testimonio. Cuando es pronunciada bajo juramento se trata de perjurio.
“No darás falso testimonio contra tu prójimo” (Ex 20, 16).
“No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos” (Mt 5, 33).
Y también tenemos que: El falso testimonio y perjurio: Son afirmaciones públicas contrarias a la verdad. Ante un tribunal viene a ser falso testimonio. Cuando es pronunciada bajo juramento se trata de perjurio.
Ahora viene el ataque a la reputación de las personas:
Juicio temerario: Admite como verdadero un defecto moral del prójimo sin tener fundamento suficiente.
Maledicencia: Sin razón que lo justifique se manifiestan defectos y faltas de otras personas que los ignoran.
Calumnia: Con palabras contrarias a la verdad se daña la reputación de otros y da ocasión a juicios falsos respecto a ellos.
Cada uno posee un derecho natural al honor de su nombre, a su reputación y a su respeto. Así la maledicencia y la calumnia lesionan las virtudes de la justicia y de la caridad.
Pero creo, humildemente que entran también los halagos y las adulaciones:
Son inmorales si alienta y confirma a otro en la malicia de sus actos y en la perversidad de su conducta. La adulación es una falta grave si se hace cómplice de vicios o pecados graves. La adulación es un pecado venial cuando sólo se desea hacerse grato, evitar un mal, remediar una necesidad u obtener ventajas legítimas.
“La vanagloria o jactancia constituye una falta contra la verdad. Lo mismo sucede con la ironía que trata de ridiculizar a uno caricaturizando de manera malévola tal o cual aspecto de su comportamiento”.
Aparece entonces: La mentira que consiste en decir falsedad con intención de engañar. La mentira es la ofensa más directa contra la verdad. Mentir es hablar u obrar contra la verdad para inducir a error.
“La gravedad de la mentira se mide según la naturaleza de la verdad que deforma, según las circunstancias, las intenciones del que la comete y los daños padecidos por los que resultan perjudicados. Si la mentira en sí sólo constituye un pecado venial, sin embargo llega a ser mortal cuando lesiona gravemente las virtudes de la justicia y la caridad”.
“Toda falta cometida contra la justicia y la verdad entraña el deber de reparación, aunque su autor haya sido perdonado. Cuando es imposible reparar un daño públicamente, es preciso hacerlo en secreto”.
Queda entonces claramente establecido que las peluquerías son, para el papa Francisco, un centro de perdición, una fábrica de bombas, un club clandestino de chismosas y chismosos, donde van a afilar el cuchillo que se tiene por lengua y, dijo Francisco, el cuchillo mata.
Juicio temerario: Admite como verdadero un defecto moral del prójimo sin tener fundamento suficiente.
Maledicencia: Sin razón que lo justifique se manifiestan defectos y faltas de otras personas que los ignoran.
Calumnia: Con palabras contrarias a la verdad se daña la reputación de otros y da ocasión a juicios falsos respecto a ellos.
Cada uno posee un derecho natural al honor de su nombre, a su reputación y a su respeto. Así la maledicencia y la calumnia lesionan las virtudes de la justicia y de la caridad.
Pero creo, humildemente que entran también los halagos y las adulaciones:
Son inmorales si alienta y confirma a otro en la malicia de sus actos y en la perversidad de su conducta. La adulación es una falta grave si se hace cómplice de vicios o pecados graves. La adulación es un pecado venial cuando sólo se desea hacerse grato, evitar un mal, remediar una necesidad u obtener ventajas legítimas.
“La vanagloria o jactancia constituye una falta contra la verdad. Lo mismo sucede con la ironía que trata de ridiculizar a uno caricaturizando de manera malévola tal o cual aspecto de su comportamiento”.
Aparece entonces: La mentira que consiste en decir falsedad con intención de engañar. La mentira es la ofensa más directa contra la verdad. Mentir es hablar u obrar contra la verdad para inducir a error.
“La gravedad de la mentira se mide según la naturaleza de la verdad que deforma, según las circunstancias, las intenciones del que la comete y los daños padecidos por los que resultan perjudicados. Si la mentira en sí sólo constituye un pecado venial, sin embargo llega a ser mortal cuando lesiona gravemente las virtudes de la justicia y la caridad”.
“Toda falta cometida contra la justicia y la verdad entraña el deber de reparación, aunque su autor haya sido perdonado. Cuando es imposible reparar un daño públicamente, es preciso hacerlo en secreto”.
Queda entonces claramente establecido que las peluquerías son, para el papa Francisco, un centro de perdición, una fábrica de bombas, un club clandestino de chismosas y chismosos, donde van a afilar el cuchillo que se tiene por lengua y, dijo Francisco, el cuchillo mata.
Para cerrar, un insufrible poema del literato José Antonio Ibarrechea.
Tus vecinas
Donde vives, te dije:
Abundan aquellas vecinas
de largas y filosas lenguas viperinas,
manantial de chismógrafas y maledicentes
de felinas miradas escondidas
tras las transparentes cortinas.
Muestran calidad y cantidad
del magnífico veneno guardado
en sus maléficas sonrisas,
cuando esbozan el ademán hipócrita,
al saludarte, tus vecinas.
Y aunque me digas
que nada de eso te importa,
me gustaría que te cuides
y que salves tu pellejo,
cuando opinan.
Pues te necesito sana,
suave dulce y entera,
como cuando nos vieron
la otra vez, felices,
besándonos desnudos en tu cocina.
Tus vecinas
Donde vives, te dije:
Abundan aquellas vecinas
de largas y filosas lenguas viperinas,
manantial de chismógrafas y maledicentes
de felinas miradas escondidas
tras las transparentes cortinas.
Muestran calidad y cantidad
del magnífico veneno guardado
en sus maléficas sonrisas,
cuando esbozan el ademán hipócrita,
al saludarte, tus vecinas.
Y aunque me digas
que nada de eso te importa,
me gustaría que te cuides
y que salves tu pellejo,
cuando opinan.
Pues te necesito sana,
suave dulce y entera,
como cuando nos vieron
la otra vez, felices,
besándonos desnudos en tu cocina.
Quiénes & Porqué/ Fuentes: AFP / Perfil / Aleteia / diceelwalter.blogspot / Foto: Crónica
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