Por Walter R. Quinteros
Encabezados por Roberto Cardarelli, jefe de la misión para Argentina y Alejandro Werner director del departamento para el Hemisferio Occidental y, luego de haber postergado la visita con motivo del alejamiento de Nicolás Dujovne del ministerio de Hacienda, los técnicos del Fondo Monetario Internacional finalmente llegan hoy a la Argentina, para iniciar la quinta y hasta ahora más compleja revisión del programa stand-by con nuestro país. ¿Bienvenidos?
Está previsto que hoy mismo iniciarán las reuniones de trabajo con los funcionarios argentinos encabezados por el nuevo ministro Hernán Lacunza.
Seguramente, los técnicos del Fondo también se reunirán con asesores de los candidatos opositores, Alberto Fernández y Roberto Lavagna.
Van a escuchar tres campanas distintas.
Señalaron a los medios, desde el FMI que: "El equipo se reunirá con las autoridades argentinas para analizar los recientes acontecimientos económicos y financieros y los planes de políticas del gobierno, también se reunirá con asesores económicos de los principales candidatos presidenciales para intercambiar puntos de vista".
De acuerdo con noticias anteriores, ya se había especulado con la posibilidad de que viajara también el mexicano Werner, jefe de Cardarelli. Esa información se terminó de confirmar ayer, desde Washington.
Para comprobar si se hicieron bien las cosas, este equipo del FMI viene a verificar que el gobierno de Mauricio Macri haya cumplido con las metas fiscales y monetarias correspondientes al segundo trimestre. O sea, si hizo los deberes.
Si sólo fuera esa la misión, los observadores en Washington creen que los enviados no deberían tener mayores problemas en aprobar los avances del programa, elevar su informe al FMI y obtener la aprobación para el próximo desembolso, previsto para mediados del mes que viene, por unos 5.400 millones de dólares que son vitales para la estabilidad del plan económico en medio del estresante proceso electoral que vivimos.
Pero en esta nueva revisión. hay otras circunstancias que los técnicos del Fondo deberán tener en cuenta.
En primer lugar, la incertidumbre en torno a la continuidad misma del programa stand-by tal como fue diseñado.
Segundo, deberán considerar también, la caída estrepitosa del peso luego de las PASO.
Tercero, el desfasaje inflacionario que se produjo.
Cuarto, las últimas medidas de gasto que tomó el Gobierno en los últimos días tras la derrota electoral, que sin duda impactarán en la pauta fiscal.
Y por último, el plan de estabilización cambiaria.
Esta es una prioridad que se fijaron el ministro Hernán Lacunza y el presidente del Banco Central, Guido Sandleris.
Pero cuando se establezca el contacto entre el equipo de Werner y Cardarelli con Alberto Fernández y sus asesores ¿Qué sucederá?
Claro está que no va a ser ésta la primera vez que se encuentran. A mediados de junio se reunieron en Buenos Aires. Cuando todo era distinto. Ahora Alberto fernández aparece como el favorito para las elecciones de octubre, y viene reclamando una renegociación inmediata del acuerdo con el FMI.
De ser así, se cree que los técnicos del FMI podrían ofrecerle algunas alternativas.
Recordemos que Fernández también habló, en su momento, de "reestructurar" la deuda con los tenedores de bonos argentinos, lo que provocó una estampida en un mercado que "sigue traumatizado" por el último default. Sus asesores económicos debieron salir rápidamente a calmar las aguas y el jueves pasado, el propio candidato desterró la posibilidad de una eventual cesación de pagos. Reto mediante.
"Argentina no tiene posibilidad de caer en default si yo soy presidente", había afirmado.
Algún tipo de negociación, alguna "movida", alguna alternativa, surgirá este fin de semana. Y nosotros aquí, como peones de ajedrez, mientras ellos observan el tablero.
Hay en juego, 5.400 millones de dólares. Mientras tanto, el prometido "bono" de $5.ooo para las Fuerzas Armadas, no fue depositado.
Buen fin de semana.
Quiénes & Porqué / En la foto: Alejandro Werner y Roberto Cardarelli
No es alentador el panorama.
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