OPINIÓN
Sólo quiero resaltar una vez más que hemos perdido el rumbo
Así como la Justicia habla a través de sus fallos, Cristina habla a través de sus tuits, pero ayer volvió a abrir la boca en Honduras, como siempre, frente a una claque bolivariana ávida de festejar sus desopilantes dichos.
Normalmente, cada vez que ella habla me crispa, pero ayer fueron tantas las mentiras, las barbaridades, las inconsistencias, las incoherencias y las contradicciones, que me dio mucha vergüenza.
En resumen, fue un festival de pavadas escupidas sin ton ni son, dichas en una conferencia que tendrá repercusión internacional, por alguien que evidenció estar mentalmente desequilibrada.
Petardeó las negociaciones que se están haciendo con el FMI para no entra en default, vinculó al capitalismo con el narcotráfico, dijo que los que antes financiaban golpes militares son los mismos que ahora financian golpes judiciales a través de los bancos de las grandes potencias que lavan el dinero producido por el narcotráfico. Y simplificó su exposición acusando de neoliberales a las grandes potencias, el FMI, la OEA, los bancos, el mercado, los jueces y las políticas de ajuste.
Una gran mezcla de conceptos falsos, ideas retrógradas y anacronismo ideológico, con lo cual generó un tremendo desconcierto en medio de las negociaciones.
Mientras tanto estamos a puertas del default, la inflación sigue creciendo, la brecha entre el dólar oficial y el paralelo preanuncia la devaluación que tarde o temprano va a explotar, el riesgo país sigue trepando sin pausa, aumentan la pobreza y el desempleo, crece el déficit fiscal, las reservas del Banco central son nulas y continúa la impresión descontrolada de billetes sin valor. Mientras tanto, crece la inseguridad, el narcotráfico se enseñorea en Rosario y se expande hacia el resto del país, aumentan las tomas de tierras, los pseudo mapuches incrementan su actividad terrorista en nuestra Patagonia, un millón y medio de chicos abandonaron la escuela, estamos en crisis energética. Pero todo eso es culpa de Macri, de la pandemia y del neoliberalismo.
Podría dedicarme a rebatir punto por punto cada frase de Cristina, pero no voy a convencer a los fanáticos y por otro lado sería demasiado largo, cosa que frecuentemente me critican.
Sólo quiero resaltar una vez más que hemos perdido el rumbo. Estamos a la deriva. Nadie conduce, no hay un plan, ni siquiera un objetivo. Nunca podremos empezar a solucionar nuestros problemas si partimos de un cúmulo de diagnósticos equivocados basados en mentiras insostenibles y en teorías que demostraron ser erróneas.
Salvo que el plan sea llevarnos al caos y profundizar la grieta para fortalecer el poder desde el clientelismo y la pobreza. En ese caso el resultado será incierto y la solución no estará exenta de una creciente dosis de violencia.
Sea lo que sea, nos lo merecemos, por imbéciles.
Jorge Tisi Baña
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