TE ASESINARÁN CON SEIS PERFORACIONES

OPINIÓN / ECONOMÍA
Cuando un amigo se va





Por Walter R. Quinteros

Dejarás de ser dinero, amigo.
Solo serás un viejo papel pintado sin validez, porque así lo disponen ellos.

Yo me acuerdo de vos, billete de cinco pesos, cuando apareciste allá por 1992, tenías todas las medidas de seguridad de los billetes, la marca de agua, la tinta ópticamente variable, el valor impreso, arriba a la izquierda, en tinta que cambiaba del color verde al azul si te inclinaban un poquito, la identificación para ciegos; la imagen latente; el hilo de seguridad; la impresión en tinta invisible. Dicen, que llegaste a ser más de 300 millones de unidades, en series que van desde la A a la J.

Ellos te van retirando de la circulación en forma lenta, penosa. Empezaron a partir del 1 de agosto del año pasado. Y se dieron un plazo para hacerte desaparecer como moneda de curso legal, hasta este 31 de enero. 

Algunos empresarios elevaron voces de protesta, te quieren por seis meses más.
Y tienen sobrados argumentos para retenerte entre nosotros.

Viste como son las cosas, uno peca de sentimental muchas veces, y revisando los bolsillos de mi ropa encontré uno de los tuyos, dobladito, quietecito, resistiendo abandonar ese refugio.
Entonces le prometí que no lo entregaría, que se quedará conmigo para recordar aquellos tiempos felices.

Vos mostrabas, billete amigo,  en tu anverso al General José de San Martín y en el reverso, el cerro de la Gloria en un color verde inolvidable.

Para aquellos desmemoriados, les recuerdo que el general José Francisco de San Martín y Matorras, Había nacido en Yapeyú, cuando éramos Virreinato del Río de la Plata, el 25 de febrero de 1778 y falleció en Boulogne-sur-Mer, Francia, el 17 de agosto de 1850. Nuestro Padre de la Patria​ fue militar y político, libertador de Argentina, Chile y Perú.


En esta acotadísima reseña recordaremos que en abril de 1784, cuando tenía seis años, llegó con su familia a la ciudad española de Cádiz ―previa estadía en Buenos Aires― y se radicó luego en la ciudad de Málaga. Comenzó sus estudios en el Real Seminario de Nobles de Madrid y en la Escuela de Temporalidades de Málaga en 1786. Ingresó posteriormente al ejército español e hizo su carrera militar en el Regimiento de Murcia. ​Combatió en el norte de África, luego contra la dominación napoleónica de España y participó en las batallas de Bailén y La Albuera.

Con 34 años, en 1812, tras haber alcanzado el grado de teniente coronel, y luego de una escala en Londres, retornó a Buenos Aires, donde se puso al servicio de la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata. ​Se le encomendó la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo (que hoy lleva su nombre), que tuvo su bautismo de fuego en el combate de San Lorenzo. 

Más tarde se le encargó la jefatura del Ejército del Norte, en reemplazo del general Manuel Belgrano. Allí concibió su plan continental, comprendiendo que el triunfo patriota en la guerra de la independencia hispanoamericana solo se lograría con la eliminación de todos los núcleos realistas que eran los centros de poder leales a mantener el sistema colonial en América.

Fue nombrado gobernador de Cuyo, con sede en la ciudad de Mendoza, allí puso en marcha su proyecto:​ Organizar al Ejército de los Andes, cruzó la cordillera del mismo nombre y lideró la liberación de Chile, en las batallas de Chacabuco y Maipú. Luego, utilizando una flota organizada y financiada por Chile, y luego de recibir instrucciones del Senado de Chile, atacó al centro del poder español en Sudamérica, la ciudad de Lima, y declaró la independencia del Perú en 1821. 

Finalizó su carrera de las armas luego de producida la famosa Entrevista de Guayaquil con Simón Bolívar, en 1822, donde le cedió su ejército y la meta de finalizar la liberación del Perú. Enfermo, regresó a su Patria.

Partió hacia Europa, donde murió el 17 de agosto de 1850.

Ellos debieron haber esperado al 17 de agosto para retirarte, billete de cinco pesos. 
Pero no. No tienen sentimientos.

Y dicen que por tratarse de ser el billete de menor denominación, has sufrido un deterioro más veloz que el resto de los billetes. Mentira, siempre hay un negociado en estas cosas.

Eras el billete de los pobres, ahora te van a reemplazar por monedas. La moneda, tiene una vida útil más extensa, dicen ellos, los que se quedan con el vuelto.

Me acuerdo cuando con vos merodeando en mi billetera, o en los bolsillos de mi ropa, íbamos de compra y con vos pasando de mano en mano me llevaba baratijas de Taiwán, Brasil, Paraguay, Bolivia y Chile a casa.

Y seguías, seguías viajando de mano en mano, de billetera en billetera, de carteras de dama a bolsillo de caballero. "Dame cuatro etiquetas de Malrboros", "troca pelo vinte reais"...

Lo que ciertamente se sabe, es que te van a destruir mediante una máquina perforadora de fajos. Los fajos de billetes como vos, serán entregados por las entidades financieras de todo el país al Banco Central de la República Argentina con gruesas perforaciones que evidencian que ya no tienes valor de circulación.

Te asesinarán con 6 perforaciones.

Después, te meterán en la trituradora de billetes que, puede destruir entre 6 y 8 millones de billetes como vos por día. En pocos minutos, esa maldita trituradora transformará los fajos de billetes como vos en pequeños "ladrillos" de papel triturado y prensado, que luego recibirá un tratamiento como residuo especial, según una normativa vigente que no tiene en cuenta nada de amores y desamores.

Te cuento que cuando vos naciste, querido 5 pesos, valías 5 dólares. Eras lo mismo.
El tiempo nos ha maltratado, nuestras políticas económicas nos han humillado.
Chau amigo.

los Quiénes & el Porqué / imagen: todocolección.net

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